El piloto Celso Míguez cree que su reto en la Indy Car será aplicar su adaptación en solitario a situaciones de carrera
25 may 2017 . Actualizado a las 07:53 h.Fernando Alonso afrontará el domingo uno de los hitos de su carrera automovilística en un entorno que era desconocido para él hasta hace apenas unos días. Sin embargo, la euforia y el optimismo se han desatado entre los aficionados después de su primera toma de contacto. He aquí alguna de las claves que sustentan las esperanzas españolas de victoria.
¿Se ha adaptado bien Fernando Alonso?
Celso Míguez, piloto y subcampeón de Fórmula 3, lo tiene claro: «Su adaptación ha sido estupenda y sorprendente, porque no se trata solo de la dificultad de cambiar de circuito, sino que el modo de conducción es muy diferente. Aquí vas a fondo casi toda la vuelta, con el volante lo más recto posible, hay que ir muy fino y acercarse a los muros para que el coche siga una trazada lo más recta posible. Y eso lo tuvo que aprender en un par de días».
¿Qué diferencias se encontrará Alonso?
En la Fórmula 1 apura la frenada cuando afronta la curva y después en pleno giro deja correr el coche. Además, se exploran los límites del vehículo en función del circuito y se adaptan a tu conducción. «Aquí el proceso es inverso. El carácter del circuito condiciona y lo sorprendente es que Alonso tuvo que adaptar su forma de conducir», insiste Míguez.
¿Cambia la técnica de frenada y aceleración?
Celso Míguez pone un ejemplo claro. «Debido a las velocidades con las que se atacan las curvas, en la Indy Car puedes verte obligado a frenar con el pie izquierdo y acelerar con el derecho al mismo tiempo, para que el coche gane adherencia», explica.
¿Qué virtudes puede explotar el asturiano?
Uno de los puntos fuertes de Fernando Alonso ha sido siempre el modo en el que optimiza sus coches y lee las carreras. «Es uno de los pilotos más completos de la historia. Puede dar la sorpresa porque estar ya al nivel de los cinco mejores frente a gente que lleva tantos años significa que piensa en carrera y que ha sabido poner el coche a punto muy bien», analiza el gallego.
¿Qué cambia entre la carrera y la calificación?
«En Indy Car influyen mucho más las diferencias que en la Fórmula 1 porque la estrategia cambia por completo. En la clasificación debes ir lo más rápido posible. Sin embargo, en carrera te ves con ruedas más viejas, el depósito lleno y con el rebufo que te obliga a no ir a fondo en cada curva», explica.
¿Qué porcentaje de éxito se basa en la estrategia?
Bastante más que en la Fórmula 1, debido a que las carreras son más largas y al propio hecho de que los monoplazas tienen más características estándar que los del Gran Circo. «Para empezar, influye mucho el equipo de ingenieros que tengas porque al tener tan escaso margen de maniobra, el que mejor interprete los baremos que se pueden alterar será el que se lleve el triunfo», explica Celso Míguez. Por otra parte, las paradas en boxes pueden proporcionar una ventaja o imprimir una penalización que decida la carrera. «Está claro que Fernando Alonso se ha adaptado a conducir solo en el óvalo de Indianápolis. Pero ahora es el momento de demostrar que puede responder en carrera, con otros coches a distancias cortas constantemente y sin la necesidad de tener que ir gas a fondo siempre», avanza.
El concepto europeo de la velocidad
Un producto tan norteamericano ha visto tambalear los cimientos de su tranquilidad con la presencia de un español. Aunque el que ha desatado tal locura a este lado del Atlántico, Fernando Alonso, no sea un piloto del montón, la fiebre por la Indy Car parece que será pasajera. Con todo, este fin de semana puede establecer un antes y un después.
¿Habrá más españoles en carrera?
Del mismo modo que sucede en la Fórmula 1, la presencia de pilotos de diferentes nacionalidades contribuye a expandir el negocio global. Este fin de semana, Oriol Serviá será el otro español en carrera. Lleva desde 1998 compitiendo en esta modalidad deportiva y llegó a ser cuarto en Indianápolis. Antes que él, pilotaron en el óvalo Fermín Vélez (1996 y 1997) y Pierre de Vizcaya, en la década de los años 20.
¿Triunfaría la Indy Car en Europa?
Celso Míguez es escéptico en este aspecto. «No estamos acostumbrados a esto», avanza. Cree que, llegado el momento, habría que plantearse el modo de implantar un certamen híbrido entre la Indy Car y la Fórmula 1. «Realmente, es un asunto complicado de abordar, porque la diferencia de mecánicas condiciona demasiado a la hora de alternar circuitos habituales en Fórmula 1 y óvalos, además de que el concepto de desarrollo de la Fórmula 1 es mucho más avanzado que el de la Indy Car», argumenta. El circuito de Indianápolis ya formó en su momento parte del calendario del Gran Circo entre los años 2005 y 2007, utilizando una recta y una curva del óvalo en el que correrá Alonso. Otras modalidades que se disputan en óvalos, como la Nascar, tienen su versión europea.