Cristiano se reencuentra destrozando a la Real

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GABRIEL BOUYS | Afp

Hat-trick del portugués para tomar impulso antes del duelo ante el PSG

10 feb 2018 . Actualizado a las 22:39 h.

El Real Madrid, y sobre todo Cristiano Ronaldo con su triplete, encontraron en la depresión de la Real Sociedad la medicina perfecta para coger impulso, confianza y moral de cara al trascendental choque que disputa el próximo miércoles ante el París Saint-Germain, una cita que marcará la temporada en el vigente campeón de Liga y de Europa, que nadie lo olvide. Sin forzar la máquina y jugando en ocasiones casi al paso, el equipo de Zinedine Zidane demostró su enorme y tradicional pegada, reducida en esta campaña, y destrozó a los donostiarras con cuatro goles y dos balones en los palos en el primer período. Con eso está todo dicho. Y pese a la avalancha que se le vino encima, el conjunto de Eusebio Sacristán sólo hizo tres faltas en ese primer tiempo de guante blanco. Si los vascos evitaron un ridículo histórico fue porque los madrileños no comparecieron en el segundo acto. Y hasta encajaron dos goles inquietantes, curiosamente ya con la BBC en el campo. Cosas del destino, o no. Al equipo merengue le han complicado sobremanera este curso en el Bernabéu los adversarios que juntaban líneas, le esperaban atrás y salían a la contra para aprovechar los espacios que deja un Real Madrid con una tendencia preocupante a partirse, lo que sería una pésima noticia con Mbappé, Cavani y Neymar de enemigos. Pero esta Real trata de llevar la iniciativa y de hacer un juego vistoso, pero sin contundencia. Esta lejos de la zona de peligro porque jugadores como Xabi Prieto, Canales, Zurutuza u Oyarzábal atesoran calidad y Willian José, ausente anoche en el Bernabéu, tiene gol, pero en defensa es quizá el once más vulnerable de la Liga. Ni cierra espacios, ni mete pierna, ni encima, ni nada. Un chollo, en fin, para tipos insaciables como Cristiano Ronaldo.

El Madrid encarriló quizá su triunfo más cómodo de la temporada en casa ya en el primer minuto, fruto de un buen centro del astro portugués que cabeceó en escorzo Lúcas Vázquez. Muy meritoria la actuación del gallego, que no sólo trabaja y marca sino que con sus constantes diagonales genera grandes espacios para sus compañeros. Curiosamente, arriba fue el mismo Madrid, con Lucas y Asensio en los costados, que le endosó una manita al Sevilla. Se situó esta vez en un 4-4-2, cuesta creer que pensando en el PSG porque en ese partido resulta innegociable para Zizou la presencia de la BBC. Si no, no se entiende que ante la Real fuera reservado Gareth Bale, igual que Casemiro, indispensable ante la escuadra de Unai Emery, y el defensa Nacho, que actuará ante los galos como lateral derecho porque Carvajal está sancionado.

Autopistas Siempre a favor de resultado, y con autopistas por delante, el Madrid hizo lo que quiso con los guipuzcoanos en el primer acto. Cristiano, muy activo, entró por todas partes y definió con acierto. Anotó dos goles ya antes del descanso, el primero tras una gran jugada entre Asensio y Marcelo y el segundo al rematar con el hombro un centro de Modric en un saque de esquina, y remató una vez al poste. Dentro del buen tono general, aunque conviene no echar las campanas al vuelo con tan blandito enemigo enfrente, destacó también el gran gol de Kroos desde la frontal. De nuevo un pase a la red, en este caso con rosquita y por arriba. Cuatro tantos lleva ya el alemán en esta Liga. Sorprende que Benzema, el '9' del Madrid, no marcase. Tuvo una muy clara pero la envió al palo. Curiosamente, el francés lleva cinco remates a la madera y dos goles en esta Liga.

La segunda mitad fue un trámite que acabó en verbena. Los madridistas se relajaron del todo, ya sólo con el PSG en sus mentes, y los donostiarras se conformaron con que el ridículo no fuera mayor o con maquillar mínimamente la derrota. Se acercaron pronto en un par de remates de Juanmi, el primero que golpeó en el palo y el segundo parado por Navas, y De la Bella se ganó una amarilla por una entrada dura a Lucas Vázquez. Mediado este segundo acto, Zidane introdujo a Isco y a Kovacic. Normal que diera descanso a Modric pero no a Lucas, el mejor junto a Cristiano. Y nada más entrar Bale, marcó Bautista. Quedaban aún la guinda del crack de Madeira, tras error de Rulli y el tanto de Illarra en el Bernabéu. Ya suma 11 goles CR7 en esta Liga y 15 ante la Real, todos en el Bernabéu.