Seis titanes gallegos en el desierto

DEPORTES

Este domingo arranca una de las pruebas más extremas del mundo con 600 ciclistas intentando superar un recorrido infernal por el norte de África

26 abr 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Más de 630 kilómetros cronometrados con un desnivel de 10.500 metros, repartidos en seis etapas en el desierto norteafricano, con las condiciones extremas que eso conlleva. Eso es lo que le espera a los 600 ciclistas que desde este domingo participarán en la Titan Desert, una de las pruebas más extremas del deporte mundial. Y en esa bendita locura se han metido seis gallegos: los pontevedreses Víctor Pampín, Manuel Caramés, Eladio Ramos y Javier Iglesias; el mosense Alberto Davila; y el valdeorrés Pablo Diéguez.

De todos, el más experimentado es Pampín, ya que ya ha sido capaz de completar dos ediciones: «Llevo muchos años en el ciclismo y desde que me enteré de este formato me picó mucho la curiosidad hacer esta prueba, de esta exigencia, en un clima tan extremo. La experiencia es increíble, pero poder terminarla es lo mejor de todo», explica, al tiempo que recuerda que colabora con una causa solidaria, Amencer, para niños discapacitados mentales. «Intentaremos recaudar dinero para comprar una bicicleta adaptada», añade.

Manuel Caramés es su compañero de equipo (Ponte un Reto), quien comenta que se siente exigido. «Me estoy presionando bastante porque quiero acabarla como sea. Hace dos años tuve un accidente, me rompí una vértebra y no me dieron el alta a tiempo para poder ir y el año pasado pillé una salmonela y bastante hice que acabé alguna etapa. Ya fallé dos años seguidos y no sé si aguantaré la presión si me pasa algo en una tercera...», reconoce. Lleva, eso sí, la lección bien aprendida: «No hay que saltarse ningún punto de hidratación. Se suele dar que como el primer día te ves fresco te saltas alguno, pero la Titan es una semana y hay que ir hidratándote desde el principio», avisa.

Lucha mental

Para el resto de gallegos será la primera vez, aunque todos llevan la lección bien aprendida: «Me dicen que a partir de la cuarta etapa es cuando de verdad empieza la verdadera Titan. Porque esto no es solo la parte fisica, que yo me encuentro muy bien. Es que allí te puede hacer daño algo que te comas o las llagas en el trasero, que hay un porcentaje altísimo de abandonos por eso... Es una prueba muy mental y de no hacer el loco los primeros días», dice Eladio Ramos.

Entre los participantes gallegos también destaca la presencia de Javier Iglesias, conocido futbolísticamente como Tito tras su paso por equipos como el Fabril, Lugo, Lalín y Portonovo. «Soy director en una multinacional, llevo una zona amplia del país y mi agenda es complicada. Viajo todas las semanas y mi vida casi no me permite ni hacer deporte. Un día mi jefe, me habló de llevar ponentes para que dieran unas charlas hablando sobre el esfuerzo en competición. Todo acabó derivando en que nos propusimos hacer nosotros alguna hazaña para poder contarla en nuestra propia piel. Todo esto empezó como una coña, pero al final pasó el tiempo y aquí estamos, en esta aventura», explica.

La Titan Desert ha pasado a ser en un objetivo para todos los amantes del deporte aventura. Es el caso de Pablo Diéguez: «Hace cuatro años, viendo un documental, me lo empecé a plantear y me lo marqué como objetivo. El año pasado ya iba a ir, pero me lo impidió una lesión. Así que ahora esto es como un sueño. Voy a la Titan más dura de la historia y lo haré representando a mi equipo (Tres Lunas) y a mi comarca. Siento el apoyo de todos los pueblos del Valdeorras. Un proyecto que ha pasado de ser personal a algo más. Es una meta. Cerrar un ciclo. Un sueño», expresa.