¿Hasta dónde llegará Doncic?

DEPORTES

Ashley Landis

La exhibición ante los Clippers es un paso más de un jugador que en la NBA, como antes en Europa, no deja de progresar

25 ago 2020 . Actualizado a las 09:17 h.

Debutó en la ACB con el Real Madrid a la edad de 16 años. A las órdenes de Pablo Laso lo ganó todo, incluyendo la Euroliga con la distinción de jugador más valorado de la fase regular y de la final a cuatro, todo ello antes de cumplir los veinte años y cruzar el Atlántico.

Con ese bagaje sobresaliente Luka Doncic desembarcó en la NBA, tras ser elegido con el número tres en el Draft. Y en la liga profesional americana está haciendo lo que siempre, progresar sin parar, dominar el baloncesto. Quizás lo que más sorprende es lo rápido que está creciendo, porque en su segundo año en los Mavericks de Dallas ya es el gran referente del equipo y una de las estrellas de la competición.

La exhibición del domingo ante Los Ángeles Clippers es una más, pero quizás la más excelsa hasta la fecha. Fue clave en la remontada de los tejanos, que llegaron a perder por veinte. Dominó el último cuarto, en el que puso contra las cuerdas al rival con dos triples consecutivos. Ahí apareció otro de los grandes nombres propios de la NBA, Kawhi Leonard, para llevar el partido a la prórroga.

Dominador de la prórroga

Y en el tiempo suplementario Luka Doncic todavía consiguió elevar su rendimiento y su influencia. Suyos fueron los siete últimos puntos de su equipo, en el minuto final, en tres acciones de distinto corte. Empató el partido a 130 con una entrada hacia canasta por el centro, freno y tiro contra tabla. Deshizo esa igualada en otra irrupción en la pintura, pero esta vez tras dibujar un reverso para dejar el balón sobre el aro con la mano derecha. Y completó con el triple sobre la bocina para el 135-133 final. En esta ocasión se valió de su extraordinario dominio del bote y su característico paso atrás para generar el espacio suficiente, armar el brazo y decidir la contienda.

Acabó el partido con 43 puntos, 17 rebotes y 13 asistencias. Pero más que entroncar con nombres propios como los de Lebron James, Michael Jordan o Zion Williamson, capaces de desplegar un baloncesto de altos vuelos gracias en buena medida a un chasis privilegiado, el esloveno entronca más con los tiempos en los que Magic Johnson dominaba los partidos desde las posición de base con sus 206 centímetros de estatura y su polivalencia, en los que Larry Bird se adueñaba de la escena apoyado en su clarividencia.