Con 43 años, busca su séptimo anillo de la NFL en una final marcada por el covid que se disputará en la madrugada del domingo al lunes
06 feb 2021 . Actualizado a las 09:56 h.Cuarenta y tres años. Diez finales de la liga nacional de fútbol americano de Estados Unidos, muchas más que cualquier otro jugador. De hecho, solo le superan los Patriots (11). Si la gana (00.30 horas del domingo, #Vamos), acumularía siete anillos, cifra que no alcanzan ningún otro equipo ni jugador. Así se forja el mito del Tom Brady, quarterback de los Bucaneros de Tampa Bay, primer equipo que juega la Super Bowl en su propio campo (el Raymond James, de Florida), y lo hará en la primera temporada con Brady.
Enfrente tendrá a los Kansas City Chiefs de Mahomes, en la primera ocasión en la que se enfrentan los dos últimos quarterbacks que ganaron el título. La igualdad entre conferencias se romperá en esta cita. Las ausencias por lesión podrían condicionar el ligero favoritismo de los visitantes.
Pero la Super Bowl es mucho más que fútbol americano. Es el negocio deportivo mundial del año, incluso en plena pandemia. Las restricciones sanitarias elevarán al máximo histórico la audiencia, que ya el año pasado fue de 102 millones de espectadores (lejos del récord del 2015, unos 114 millones). Esta es una de las razones de que cada uno de los casi cien anuncios que se emitirán durante las tres horas y media de retransmisión se coticen a 4.5 millones (30 segundos).
Al mismo tiempo, se consumirán 230 millones de litros de cerveza y la ingente cantidad de telespectadores se gastarán casi mil millones de euros en refrescos, trescientos en patatas fritas y doscientos en pizzas. Todo, sin levantarse del sofá.
Rosalía podría tomar el testigo de Enrique Iglesias como intérprete en el descanso
El hype por encima de todo. En un año complicado para las grandes promociones, los estadounidenses son los reyes del showbusiness. Los miniconciertos del descanso del partido son el momento cumbre de la jornada. El año pasado triunfaron Jennifer López y Shakira. Este año actuará el canadiense The Weeknd (que pagará 7 millones por ello), pero el gran reclamo (sin confirmar, a pesar de que apenas faltan unas horas para que el balón vuele) es Rosalía, que se convertiría en la segunda española en participar en el evento (Enrique Iglesias lo hizo en el año 2000). Rosalía ya colaboró con The Weeknd en un remix de Blinding Lights, la canción más escuchada en el mundo en el año 2020.
Jazmine Sullivan y Eric Church interpretarán el himno de Estados Unidos (la versión en lenguaje de signos correrá a cargo del rapero Warren Wawa Snipe), y Gabriela Sarmiento Wilson, H.E.R., la patriótica America the Beautiful. La poetisa la Amanda Gorman recitará una pieza literaria. Todo, solo diez minutos antes del inicio del choque.
Apenas 22.000 espectadores, con 7.500 sanitarios invitados como agradecimiento
Debido a la pandemia, solo 22.000 personas podrán presenciar el partido en el estadio Raymond James de Tampa, con capacidad para unos 75.000 espectadores. Entre los afortunados están 7.500 enfermeras y personal sanitario que ha luchado en primera línea contra el covid-19 y que, en agradecimiento, ha recibido entradas gratuitas. Cada espectador recibirá un paquete con una mascarilla, gel desinfectante y unas normas de comportamiento.
Fiestas y positivos
La NFL ya ha advertido de que no suspenderá el encuentro por muchos positivos que se den estas horas, aunque sean Mahomes y Brady.
Por otra parte, las autoridades sanitarias han mostrado su preocupación por las fiestas privadas que se puedan organizar para ver el partido por televisión, y las posteriores a la final en las que participen los seguidores del equipo ganador. También han recomendado a la población que no viaje a Tampa, para no convertir la Super Bowl en un evento superpropagador.