Saúl Craviotto: «Todo el mundo piensa en el oro en Tokio pero hay que tener los pies en el suelo»

Nel Oliveira
Nel Oliveira REDACCIÓN

DEPORTES

El piragüista Saúl Craviotto
El piragüista Saúl Craviotto LAVANDEIRA JR

El palista ilerdense encara su cuarta Olimpiada en busca de un quinto metal en su casillero particular: «Del piragüismo no se puede vivir, y lo digo yo con cuatro medallas olímpicas»

27 may 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Saúl Craviotto (Lleida, 1984) encara los que serán sus cuartos Juegos Olímpicos. Oro en Pekín, en 2008; plata en Londres, en 2012; y oro y bronce en Río de Janeiro, en 2016. En la Olimpiada de Tokio buscará su quinto metal, que lo convertiría en el español con más medallas en la historia de los Juegos. A sus 36 años, toda una vida dedicada al piragüismo, será el abanderado de la expedición nacional junto a la nadadora Mireia Belmonte. Su papel en Japón, según explica, podría suponer un punto de inflexión de cara a colgar el remo. Craviotto, al igual que el resto de la selección de piragüismo, espera regresar a España con el oro colgado del cuello, pero no será tarea fácil. «La presión evidentemente existe», asegura. A los palistas más jóvenes, que lo tienen a él como referencia, siempre les aconseja tener un plan B, ya que «del piragüismo no se puede vivir, y lo digo yo con cuatro medallas olímpicas».

-Lo primero de todo, enhorabuena por ser el abanderado de España en los Juegos Olímpicos de Tokio junto a Mireia Belmonte. ¿Qué supone para usted este reconocimiento?

-Imagínate. Es lo máximo a lo que se puede aspirar como deportista olímpico. Para mí es un sueño, pero también una gran responsabilidad portar la bandera de tu país. Estoy seguro de que van a ser unos Juegos inolvidables.

-¿Esto ha supuesto un cambio de planes en el viaje de la expedición nacional de piragüismo a Tokio?

-En teoría íbamos a viajar cuatro o cinco días antes. Ahora, al ser el abanderado, tendremos que estar desde el inicio de los Juegos y nosotros competimos el último día. Estaremos más días, pero casi hasta mejor. Así podremos amoldarnos más al cambio horario, temperaturas, etc.

-Felicitarle también por el oro en la Copa del Mundo de Szeged. ¿Qué sensaciones han tenido durante la competición?

-Muy buenas. Era todo una incertidumbre. Llevábamos año y pico sin competir y al final siempre tienes ese miedo de cómo va a ser la puesta en escena y cómo van a estar los rivales. Llegar allí y conseguir el oro en la prueba que estamos preparando para los Juegos (K4 500) es una buena noticia, pero siempre con los pies en el suelo. Los alemanes ahora mismo estarán analizando palada a palada para ver cómo pueden conseguir ese oro en Tokio, así que hay que ser cautos y tener los pies en el suelo.

-Hicieron un tiempo de 1:22:15. ¿Con esa marca cree que habrá medalla en Japón para el K4?

-El tiempo en sí no es que sea muy bueno, pero no es tan importante como en atletismo. En piragüismo, como hay mucha influencia del viento, de la temperatura del agua y demás, ese tiempo no es muy relevante en cuanto a pensar en medalla en el futuro. La mejor referencia que tenemos es el competidor que tenemos al lado y ahí estamos, para luchar. Te mentiría si te dijese que no estamos pensando en medalla, pero hay que pelearla.

-En Szeged vimos embarcaciones de sobra conocidas como la de Alemania, pero ¿ha notado alguna sorpresa con países que no esperaba ver en podio o cerca de él?

-Si te fijas en la final sí que es verdad que España y Alemania estamos un pelín por encima. Pero es que detrás están todos súper igualados. No me atrevo a decirte un país. Portugal quedó cuarta, pero a un palmo del tercero. El quinto a un palmo de ellos y así todos.

-¿En qué estado de forma cree que va a llegar el K4 a los Juegos?

-Todavía faltan dos meses y queda tiempo suficiente para ponerse en forma, bajarla, pinchar… En dos meses se pueden hacer milagros. Nos queda por así decirlo lo peor de la temporada. Mucho trabajo de tolerancia láctica y de ritmo de competición. Queda lo más duro físicamente. Por la experiencia que tengo con Miguel, mi entrenador, no tengo ninguna duda. Siempre me ha hecho llegar al 100% a los Juegos y no tengo duda de que así será.

-No esconden que el objetivo en Tokio es la medalla de oro. ¿Tienen mucha presión encima por conseguirla?

-La presión evidentemente existe y más después de este oro. Ahora ya todo el mundo piensa en oro. Estoy convencido de que si quedamos plata o bronce va a parecer un fracaso, pero forma parte del deporte. La presión existe y cuando vienes de tres Juegos Olímpicos sacando medalla, medalla, medalla al final todo el mundo te pone en las quinielas.  

-Existe la posibilidad de que participe en el K1 200 junto a su compañero Carlos Arévalo. ¿Ha comentado algo ya con el seleccionador o sus compañeros sobre el tema?

-Sí, en principio vamos a doblar porque el calendario lo permite. Además, a Arévalo y a mí nos viene hasta bien. Nos hace entrar en competición y quitar esos nervios del inicio, pero sí es verdad que ahí no tengo tanta presión. Si saco medalla será un extra, pero no lo estamos preparando a conciencia. El objetivo es el K4 y no hay que olvidarse de eso.

-No le puedo dejar de preguntar por sus cuatro medallas olímpicas. Con una más igualaría a David Cal como deportista español con más medallas en los Juegos. Con un oro ya sería el español con más metales dorados. ¿Es algo que se le pasa por la cabeza?

-No pienso mucho en ello. Me acuerdo cuando me pregunta la prensa, pero ir a por el oro o superar a alguien no es algo en lo que piense día a día. Todo lo contrario. Cuando me retire ya miraré atrás y veré lo que hemos conseguido.

-Lleva toda la vida dentro del mundo del piragüismo. ¿Después de Tokio va a seguir vinculado o desea desconectar y dedicarse  a algo que quizá no pudiera hacer hasta ahora?

-Llevo casi 25 años metido en el deporte de élite y en el piragüismo toda la vida, como bien dices. No sé, primero vamos a ir a Tokio, vamos a ver qué ocurre, y después sí que voy a desconectar. Voy a pegarme unas vacaciones largas y desconectar, pero no del piragüismo. No me veo capaz de estar quince días sin tocar una pala (ríe). Desconectaré de la presión unos meses y después veremos si seguimos o no.  

-¿Es complicado para usted, un palista top a nivel mundial, compaginar su trabajo, en este caso como policía, con la competición de alto nivel?

-Es complicado, pero por suerte dentro del Cuerpo Nacional de Policía existen una serie de facilidades para poder compaginarlo. Estoy muy agradecido por todo lo que han hecho y están haciendo por mí.

-¿Qué mensaje le mandaría a los palistas más jóvenes que lo tienen a usted como referencia en relación a este tema?

-Lo que le suelo aconsejar a esos jóvenes de 20 años que están pensando solo en remar, remar y remar para ir a los Juegos Olímpicos es que hay que tener un plan B. El piragüismo no es un deporte del que se pueda vivir y te lo digo yo, que tengo cuatro medallas olímpicas. Hay que seguir estudiando, trabajando y labrándose un futuro porque el deporte dura lo que dura y luego la vida es muy larga.

-Tiene 36 años, para la Olimpiada de 2024 en París ya tendría 40. ¿Serán los de Tokio sus últimos Juegos?

-Hay muchos rivales que siguen con mi edad o más y continúan ganando. Con 40 años todavía se puede hacer algo, así que no lo sé. En principio las lesiones me están respetando, físicamente siento que puedo continuar y al final hago lo que me gusta. Si decido colgar la pala será por tema mental, porque no tenga ilusión o porque quiera pasar más tiempo con mis hijas. Es una decisión que tengo que macerar bien y tendrá mucha importancia lo que pase en los Juegos de Tokio.

-Ha habido mucha incertidumbre hasta el final en la selección de los palistas para el K4 en Tokio. Finalmente irá usted junto a Marcus Cooper, Arévalo y Rodrigo Germade. Se quedaron fuera Cristian Toro y Carlos Garrote. ¿Está  dolido con las acusaciones y la actitud de Toro y Carlos hacia Miguel García después de saber que se quedaban fuera de los Juegos?

-Si te digo la verdad tampoco pienso mucho en ello. Es algo que pasa mucho en el mundo del deporte. Ya llevo muchos años en la élite y he coincidido con muchas generaciones, muchos deportistas, diferentes formas de ser, personalidades… Yo estoy muy centrado en lo mío, en remar, en los Juegos y es lo que está por encima ahora. No le doy mucha importancia al tema la verdad.