Miguel Ferrer y Miguel Solís ponen en marcha un proyecto para propiciar nuevas alternativas de ocio en un terreno de mil metros cuadrados en Karat (Konso)
26 mar 2019 . Actualizado a las 13:18 h.Desde el altruismo y la solidaridad, los «skaters» asturianos Miguel Ferrer y Miguel Solís han emprendido un proyecto para la construcción de un «skatepark», en Karat, ubicada en la provincia de Konso, en la República Democrática Federal de Etiopía. En este país, situado en el Cuerno de África, donde apenas hay formas de canalizar el ocio, su iniciativa para que los niños y jóvenes puedan disfrutar del deporte del monopatín ha insuflado una gran ilusión entre la población, que espera impaciente la plasmación de una idea que les ha entusiasmado.
Miguel Ferrer se trasladó el verano pasado a Etiopía. Su amigo, Miguel Solís, ya lo había visitado en cinco ocasiones anteriores. En las dos primeras semanas estuvieron en la capital, Addis Abeba, donde visitaron el primer «skatepark» local, «Ethiopía Skate», y posteriormente se trasladaron a la frontera con Kenia donde permanecieron con la tribu «Nyangatom»
Una nueva forma de ocio
«Nyangatom es como un páramo, a cada cien metros hay un poblado, que ocupa una familia», comenta Miguel Ferrer. Durante este tiempo, apreciaron la relevante labor humanitaria que desarrollaban David y Ángel, adscritos a la comunidad misionera de San Pablo Apóstol, ayudando a la población a cubrir sus necesidades más básicas. Miguel Solís se quedó tres meses y Miguel Ferrer se volvió a Asturias, pero en enero de este año decidieron regresar de nuevo a Etiopía. Pero esta vez no era igual que las ocasiones anteriores. En colaboración con la «Konso Development Association», iban a planificar la puesta en marcha de un proyecto para construir el «skatepark» en un terreno situado a cinco minutos a pie del centro de la ciudad, debajo de una futura escuela.
Este terreno, ubicado en la provincia de Konso, declarado Patrimonio Cultural de la Unesco, cuenta con una extensión de mil metros cuadrados, de los que quieren destinar seiscientos al «Karat skatepark», otros cien para instalar una caseta de almacenaje para guardar los «skates», y trescientos a la sombra de un árbol autóctono donde quieren construir un área recreativa.
El proyecto se realizará bajo la forma de crowdfunding, un micromecenazgo que consiste en colaborar a cubrir la financiación de los 30.000 euros en los que se cifra la iniciativa, a través de donaciones en la página web «skatelikelion.es», que estará disponible en los próximos días y en la que se podrá obtener desde camisetas a tazas con el logotipo de la asociación del mismo nombre, sin ánimo de lucro, y a través del contacto en Instagram y Facebook bajo el nombre de «Sk8likelion», donde se podrá ir siguiendo la evolución del proyecto.
Juguetes con alambres y ruedas
«Los occidentales asociamos Etiopía a desierto y hambre y esa imagen no se corresponde con la realidad. Es el único país africano que no fue colonizado en su totalidad y tiene un patrimonio cultural muy rico. Existen muchas diferencias en función de las zonas donde viva la gente, pero, en general, viven felices, a pesar de los pocos medios que tienen», expone Miguel Ferrer.
Descubrir el «skate» fue toda una sorpresa para los niños y adolescentes. «En algunas zonas de Etiopía no tienen ni balones. He visto a niños jugar con un alambre de metal circular y con rodamientos de una moto o las ruedas de una silla de ruedas. Para ellos, el skate es una motivación, patinar es una forma de superación y algo por lo que luchar», subraya. Es un deporte que se puede practicar a cualquier edad. «Desde los cuatro años ya se puede empezar. Es una oportunidad para realizarse y perseguir un sueño», incide este joven emprendedor asturiano.
El equipo
«Skatelikelion» es una asociación sin ánimo de lucro creada con el fin de promover el «skateboarding» en Etiopía. Entre sus objetivos, destaca el facilitar el acceso del patín en un país en el que no es posible adquirirlo, así como dar a conocer y transmitir los valores de esta actividad como forma de superación y actividad física. Gracias a la colaboración con «Skateshop» locales, realizarán recolectas de material usado que serán llevados al país por los miembros de la asociación y personas voluntarias que estén dispuestas a ayudar en el transporte.
Miguel Ferrer y Miguel Solís no están solos en este ambicioso proyecto. Ambos cuentan con colaboradores, entre los que figuran Lago Dosil, junto a su equipo de APPODOO (empresa dedicada al software de gestión tienda online y facturación y diseño de Apps y webs), el guía turístico Bereket Suthomo, que ayuda a la «Konso Development Association (KDA)» a gestionar este proyecto, el General Manager de la KDA Sika Shibru y Germán Santos, encargado del diseño de la página web.
Material ‘made in Asturias’ para Etiopía
El primer contacto con el patín que tuvo Etiopía fue gracias a la asociación «Megabi Skateboards», que en el año 2005 empezó a promover el «skate», especialmente entre los niños en el monte Entoto, a las afueras de la capital Addis Abeba. Ahí fue donde Israel Dejene comenzó su proyecto, creando el «Megabi Skate», lugar en el que lleva 13 años impartiendo clases de «skateboard» y de música a los más pequeños.
En el año 2013, en Addis Abeba, un grupo de «skateboarders» locales e internacionales crearon la primera comunidad de «skaters» en Etiopía, llamada «Ethiopía Skate», compañía con la que los asturianos colaboran dotándoles de material. Comenzaron organizando quedadas y construyendo una mini rampa de madera. Con el tiempo fueron ganando simpatizantes y lograron hacer de gente local «skaters» de nivel, por lo que no se conformaron y decidieron organizar la construcción de un «skatepark». En el año 2015 «Megabi Skateboards», fue visitada por los mundialmente famosos «skaters» Tony Hawk y Nyjah Huston, quienes apoyaron económicamente a la construcción de su mini rampa de hormigón dentro de su instalación. ?En abril de 2016, con la colaboración de «Make Life Skate Life», se terminó la construcción del primer «skatepark» de Etiopía, en Addis Abeba. Fue construido gracias al «crowfounding» y el programa de voluntariado organizado por ellos.
Tras el éxito obtenido en el primero y haber conseguido una licencia de construcción en la ciudad de Hawassa (a medio camino de Konso desde la capital), «Ethiopía Skate» volvió a lograr el dinero necesario para la construcción de su segundo «skatepark». Ahora los asturianos Miguel Ferrer y Miguel Solís confían en poder repetir su hazaña.
