Unas 1.600 personas de una treintena de colectivos vuelven a pedir la eliminación de las corridas de toros a las puertas de El Bibio, en donde no hubo altercados pero sí muchas proclamas contra los taurinos
14 ago 2016 . Actualizado a las 23:21 h.«Asturias es antitaurina», «la tortura no es cultura», «tauromaquia, abolición», «esta plaza la vamos a cerrar», «luego diréis que somos cinco o seis», «una aberración no es tradición» o «sin subvenciones no sois nada». Son algunos de los lemas que coreaban sin descanso los participantes en la manifestación antitaurina convocada por Anadel y una treintena de colectivos, entre los que se encontraban partidos políticos como Podemos, Izquierda Unida y Equo. En 2006, la primera protesta contra las corridas de toros se celebraba coincidiendo con la Feria de Begoña en El Bibio y aglutinaba a un centenar de personas. Ayer, según los organizadores, eran alrededor de 1.600 las personas que salieron a la calle para dejar clara su repulsa al maltrato animal que, en su opinión, existe en estos festejos.
Los manifestantes partieron de la plazuela de San Miguel en un recorrido que les llevó por diversas calles de la ciudad hasta la plaza de toros, en donde la Policía había acotado un espacio con vallas en la zona ajardinada que está situada en la parte derecha de la entrada principal. De esta manera, se evitaron enfrentamientos directos entre taurinos y antitaurinos, aunque sí hubo muchos silbidos e improperios como «paletos», «asesinos» y «cobardes» desde detrás de las gradas y algún que otro corte de mangas por parte de quienes entraban en la plaza que, en general, hicieron oídos sordos a la protesta o sonreían con su entrada en la mano. Ni unos ni otros tenían permitido aproximarse y el par de veces que dos antitaurinas quisieron llevar su protesta más allá de la valla fueron conminadas a retirarse por la Policía. Al igual que quienes, en el lado contrario, intentaron responder a los silbidos y proclamas antitaurinas encarándose de forma directa??, que eran invitados a dejarlo estar y seguir su camino hacia el interior de la plaza.
Año de avances en la eliminación de festejos taurinos en España
Antonio Suárez, representante de Anadel, valoró que 2016 este siendo un año de claro avance de la conciencia social sobre los derechos de los animales y puso ejemplos clave como el fin de las corridas de toros en A Coruña, al suspenderse la subvención municipal, y la eliminación de festejos tan polémicos como el Toro de la Vega en Tordesillas. Suárez, en relación al lema «sin subvenciones no sois nada» coreado en la protesta, recordó que la tauromaquia recibe «millones de euros de subvenciones no sólo de las administraciones públicas, sino también de la Unión Europea que sustenta que las ganaderías del toro de lidia sobrevivan».
«Gijón es una ciudad moderna, avanzada y siempre presumió de progresista, por lo que creemos que deben eliminarse las corridas de toros del programa de las fiestas de Begoña», aseguró, considerando que su mantenimiento es sinónimo de «vergüenza» para la ciudad. También valoró de forma positiva que, cada año, sean más las personas que se animan a salir a la calle para protestar contra la celebración de corridas de toros en Gijón y, en este sentido, confió en que «los políticos que nos gobiernan den el paso adelante y le den un uso público en esta plaza en la que todos los años se tortura y se asesina solo para entretener a unos pocos». Al respecto, recordó que recientemente hubo oportunidad de eliminar la celebración de corridas de toros en Gijón, con motivo de la salida a concurso de la gestión de la plaza de toros de El Bibio. Sin embargo, «salió adelante otra vez con los votos de Foro, PSOE, PP y Ciudadanos. Sólo votaron en contra Podemos e Izquierda Unida».