El «tsunami» de Ferraz arrasa toda posibilidad de un tripartito en Gijón

J. C. Gea GIJÓN

GIJÓN

Negociaciones postelectorales tras el 15-J en la Casa del Pueblo de Gijón
Negociaciones postelectorales tras el 15-J en la Casa del Pueblo de Gijón

Los socialistas aseguran que «siguen siendo los mismos», IU les niega «autoridad moral» para encabezar una moción contra Foro y XSP reitera que no apoyará «a ningún socialista como alcalde»

24 oct 2016 . Actualizado a las 16:03 h.

El tsunami originado el domingo en Ferraz ha llegado con fuerza a Gijón. Pero solo para que la resaca deje aún más a la vista lo rocoso, y aparentemente irreconciliable, de las posiciones de los dos principales grupos de la izquierda local, y a IU más cerca de Xixón Sí Puede. O, al menos, sensiblemente más alejada del PSOE. La decisión de dejar paso a un nuevo gobierno de Mariano Rajoy adoptada en el Comité Federal socialista ha ha contribuido a mostrar aún más a las claras la inviabilidad de un entendimiento que sustente una hipotética moción de censura contra Carmen Moriyón y la relativa tranquilidad con la que, desde su minoría, el gobierno local de Foro puede ir cruzando el ecuador de su mandato, aunque sea con mucha agua en las bodegas y los escollos del presupuesto para el año con sus filos ya a la vista. Así lo han mostrado las comparecencias de los tres representantes del inviable tripartito gijonés -José María Pérez (PSOE), Aurelio Martín (IU) y Mario Suárez (Xixon Sí Puede)- apenas veinticuatro horas después del anuncio de Ferraz para hacer acuse de recibo con algunas declaraciones más o menos retumbantes, pero con un resultado que tiene muy poco de nuevo. Casi nada.

En un extremo, José María Pérez (PSOE: 7 concejales) ha apelado al patrimonio local del partido que «ha liderado el cambio en Gijón» desde los primeros ayuntamientos democráticos para proclamar que, al menos en la ciudad los socialistas siguen «siendo los mismos», con o sin abstención en Madrid. En el otro, y en resumen, Mario Suárez (XSP: 6 concejales) ha sentenciado, casi tonante, que la marca local de Podemos no contempla escenario alguno «en el que ningún miembro del PSOE sea alcalde de esta ciudad». Y en medio, Aurelio Martín (IU: dos concejales) es el único que parece haber variado sus posiciones, al negar hoy al PSOE  toda «autoridad moral» para liderar una moción de censura que hasta ahora les otorgaba.

Una posición la de Martín previsible, no obstante, desde el pasado sábado, cuando la asamblea local de IU se pronunció, por una mayoría que se acercó mucho al pleno, a rechazar «de facto» los acuerdos regionales con el PSOE en caso de que los abstencionistas llevasen el pulso en Ferraz. Antes incluso del mandato asambleario, Martín había puesto ya fecha de caducidad -la misma de este año- a una posible moción. Los acontecimientos vienen a resaltar aún más en rojo esa fecha, por lo que las llamadas del portavoz de IU a tomarse «un tiempo» para «asentar» las conclusiones y «ver si nos llevan a algún puerto» suenan, en su tono conciliador, casi anacrónicas tras el escenario que al derivado del 23-O en Ferraz. En todo caso, para Martín, plantearse mociones a partir de Año Nuevo «sería enredar».

Autoridad moral

El presidente de la gestora local y portavoz socialista comparecía ya escocido contra esa recusación de «autoridad moral», que Martín aireaba de buena mañana en SER Gijón. «No sé dónde se dan los carnés que reparten la autoridad moral, no admitimos autoridades morales superiores», le ha replicado José María Pérez, que cree que -al igual que viene exigiendo a XSP desde el fracaso del tripartito- IU «tendrá que explicar» por qué «es mejor que Foro gobierne» en una ciudad donde hay una mayoría de izquierdas »; una situación que, como ha recordado al portavoz de IU sucede en otros ayuntamientos y autonomías. Y también, con subrayado, en Asturias.

Pérez baraja posibles «excusas para justificar vetos a alguien, o a una organización en su conjunto». Martín lo niega. «No hay vetos, sino una reflexión política en voz alta, consecuencia de las decisiones del PSOE» en un mapa político general donde «no vivimos en bolas de cristal» aisladas y donde «la decisión que encabeza Javier Fernández» ha derribado «como un castillo de naipes», para IU,  «unas políticas, unos valores y una dinámica política en Asturias».

Pero ha habido algo mucho más contundente e inédito en la relación entre ambos partidos desde junio de 2015: la negación formal de la preeminencia que hasta el momento IU concedía al PSOE como cabeza de un hipotético recambio en la Alcaldía. Aritmética mediante, Martín ha apuntado directamente al punto sensible del PSOE en la corporación: «Algunos deben saber que 7 de 15 no son mayoría», ha esgrimido el portavoz de IU, recomendando al PSOE «cierto sentido de la modestia» y una actitud que le permita «metabolizar» un panorama en el que «hay que negociar». Cincelado: «No vale "la alcaldía es mía o no es de nadie"». Las 66 medidas acordadas por PSOE e IU en la negociación de 2015, que José María Pérez ha puesto de nuevo sobre la mesa como pìedra de toque para un entendimiento de las izquierdas locales, empiezan a parecer un documento obsoleto.

Un acto de obscenidad

A Mario Suárez solo le quedaba decir lo evidente:«Nos alegramos de que IU plantee que el PSOE no puede encabezar la moción de censura», ha dicho el portavoz y secretario local de XSP, que también se ha remontado a la frustrada negociación postelectoral para asegurar que «nosotros llegamos a esa conclusión mucho antes, por estas razones y por muchas otras»; que por eso insistieron en defender su candidatura a la alcaldía y que lo único que ha venido de Madrid («un acto de obscenidad para muchos militantes socialistas») ha sido la «ratificación de esa situación».

«El hecho de que el PSOE vaya a hacer presidente a Rajoy ayuda a hacer las cosas» con los socialistas, afirma el portavoz morado, que minimiza lo sucedido hasta el tamaño de «una tachuela más en el camino» del entendimiento con el PSOE en Gijón. También, como Aurelio Martín, ha dibujado en la pizarra las cuentas de la corporación: «Es evidente que 6+2 es más que 7», y ha admitido que «eso aproxima» a los 6 y los 2 de esa aritmética, según «una lógica vigente a nivel estatal» en los acuerdos entre Podemos e IU.

A partir de ahí, Suárez del Fueyo dice no saber «lo que va a pasar» y en todo caso remite a una «hoja de ruta que pasa por el debate interno» y un «la madurez de un proceso que defina un coro de voces uniformes» en el interior de XSP? e, institucionalmente, por lo que suceda en «otro camino o estación de peaje» que puede ser muy arduo para Foro: los presupuestos para 2017. Queda mucho más claro lo que sí ha pasado: que las mareas han devuelto a los tres partidos a la misma mesa de la Casa del Pueblo donde fracasaba el tripartito, solo que la silla de Aurelio Martín ahora aparece en un lugar distinto.