Los dos grupos se oponen a la concesión de más ayudas municipales y piden que el municipio se haga con la marca, ante un posible embargo y subasta por parte de Hacienda
31 mar 2017 . Actualizado a las 16:24 h.Ni un céntimo más de ayudas públicas para la Semana Negra; dejar manos libres a Hacienda para que embargue la marca en caso de que la organización no satisfaga sus débitos fiscales, y pujar desde el Ayuntamiento para hacerse con ella en subasta judicial. Y después, asumir la gestión del certamen mediante un posible modelo de concesión municipal. Es la receta que ofrece el grupo municipal del Partido Popular en el Ayuntamiento de Gijón para resolver la delicada situación financiera de un festival que, a pesar de sus conocidas posiciones críticas hacia el certamen, los populares consideran la marca Semana Negra un «activo indudable» de la que permanece «secuestrado» por los gestores. La SN adeuda 37.000 euros al fisco, y la marca del festival está depositada en la actualidad en concepto de aval. Una situación agravada por los más de 200.000 euros que adeuda a proveedores, y a la que el equipo de Gobierno de Foro ha anunciado que dará respuesta incrementando este mismo año las ayudas al certamen en 75.000 euros.
Esa medida también ha merecido el rechazo de Ciudadanos, cuya posición coincide plenamente con la del PP. En un comunicado, su portavoz, José Carlos Fernández Sarasola, ha pedido que el Ayuntamiento recupere la marca, «tome las riendas» de la Semana Negra y esta «se desligue» de la asociación organizadora. «Por nuestra parte creemos positivo que el Ayuntamiento pueda recuperar la marca, ya que el valor de la misma ha sido gracias a las facilidades y ayudas municipales, y coger las riendas de la organización de este certamen, para redimensionarlo y recuperar su carácter netamente cultural», añade el comunicado. Fernández Sarasola deplora los intentos de Foro «para tratar de rescatar» a una entidad «que se benefició durante décadas de todo el negocio montado en torno a este certamen». Por ello, ha solicitado el acceso al expediente del convenio entre el Ayuntamiento de Gijón y la Asociación Semana Negra de cara a constatar que la organización «no recibe ningún trato de favor» por parte del consistorio.
En esa misma línea, el edil popular Pablo González ha sido más contundente: «Qué les debemos a esos señores que nos han secuestrado la marca a todos los gijoneses», se ha preguntado el concejal, que culpa de la situación a «unos señores que echaron cara y registraron la marca antes»; hecho que, a su vez, ha relacionado con «una guerra interna en el PSOE» en el tránsito del mandato de Vicente Álvarez Areces -bajo cuya alcaldía se fundó la Semana- al de cargo Paz Fernández Felgueroso.
Sobre la valoración de la marca en dos millones de euros, el portavoz popular y presidente local, Mariano Marín lo ve «un absurdo». Pablo González ha sido más contundente, al considerar que «esa cantidad posiblemente se fijara después de una noche de alcohol».
Por otra parte, González ha distinguido «absolutamente» las circunstancias de la compra de la marca del Sporting por parte del Ayuntamiento de las relativas a la Semana Negra. «El Sporting tiene un montón de activos y la Semana Negra un montón de gestores», ha dicho el edil, quien ha defendido el pase a manos municipales de la gestión para evitar -ha argumentado- que los organizadores «enfoquen con su criterio» el certamen.
A ello aha añadido el argumento económico: «Si son incapaces, después de casi 30 años de hacer la Semana Negra sin necesitar subvenciones o no tener pérdidas deberían dejar a otros que lo hagan». Los ediles populares aseguran que a la organización se le pagan «100.000 euros más otros 150.000 euros con facturas», además de «negociar con la Autoridad Portuaria». «La Semana Negra no sería nada sin el apoyo de Gijón», ha remachado González. Para Mariano Marín, la organización de la Semana Negra no tiene que tener «un trato diferente» a otros beneficiarios de subvenciones, y ha recalcado que «muchas empresas privadas que recibieran un millón de visitantes sabrían sacar rentabilidad a un evento de esas características, en lugar de depender de subvenciones casi 30 años después».
«Están viviendo de nuestras subvenciones y gastos y todavía quieren un traje a medida para salir del pozo donde están», ha insistido, para añadir que el Ayuntamiento se lo puede encargar a cualquier emprendedor que haga algo digno y no «esta cochambre». «Si siguen estos gestores nos quedaremos sin Semana Negra», ha advertido el concejal popular.
Mariano Marín, por su lado, ha defendido que la SN fue «una buena idea cuando predominaba el enfoque cultural» y no «el de barraca». Este ha incidido en que los grupos tienen derecho a saber los ingresos y los gastos para saber de dónde viene esa deuda y para comprobar si realmente es gratuito.