Barbón compromete el pacto con IU y Podemos como su «primera decisión» si gana las primarias

J. C. Gea GIJÓN

GIJÓN

Adrián Barbón, y junto a él Adriana Lastra, a las puertas de la Casa del Pueblo de Gijón
Adrián Barbón, y junto a él Adriana Lastra, a las puertas de la Casa del Pueblo de Gijón

El candidato sanchista se presenta como el de la militancia y el cambio en un multitudinario acto que acabó en la calle y en el que estuvo arropado por Adriana Lastra

07 jul 2017 . Actualizado a las 17:35 h.

La primera acción que Adrián Barbón emprenderá en caso de ganar las primarias a la secretaría general de la Federación Socialista Asturiana (FSA) será pedir «junto a Javier Fernández, a Podemos e IU que nos sentemos para hablar de los pactos de la izquierda asturiana y desalojar a la derecha de Gijón». Así lo ha comprometido el alcalde de Laviana en su presentación como candidato en un multitudinario acto celebrado en la Casa del Pueblo de Gijón; el mismo escenario donde 24 horas antes hacía lo propio su único rival confirmado hasta el momento, el gijonés José María Pérez.

En un acto de alto contenido emocional que ha acabado con micrófono portátil en mano y rodeado de cientos de militantes bloqueando la calle de La Argandona, Barbón se ha presentado como el candidato de la militancia y del «cambio frente a la continuidad», y ha anunciado cambios de calado en el modelo de partido, como el sometimiento al voto de la militancia de los pactos de gobierno o la creación de secretarías específicas para la política municipal, con el refuerzo de otras como las de formación o memoria histórica. Asimismo ha confirmado que su candidatura solo lo es a la secretaría general de la FSA.

Le escuchaba en primera fila visiblemente emocionada e incluso dejando escapar alguna lágrima la portavoz adjunta del PSOE en el Congreso , Adriana Lastra, junto a la integrante de la ejecutiva federal María Luisa Carcedo y los exconsejeros Faustino Blanco, Francisco Blanco y Graciela Blanco, además de alcaldes de varios municipios. En torno a ellos, una amplia representación de las agrupaciones locales de toda Asturias -en especial de las Cuencas mineras-, algunos de cuyos militantes han precedido a Barbón en la tribuna, con la exconcejala gijonesa Carmen Veiga como conductora del acto. Las intervenciones previas han abundado en reproches al «aparato» y las «élites» del PSOE por «despreciar a la militancia», y han mostrado su rechazo lo sucedido desde el «fatídico» cese de Pedro Sánchez por la Ejecutiva Federal el pasado octubre.

Alguno de ellos ha mostrado la disposición de sectores como los partidarios de Patxi López en las pasadas generales a apoyar la candidatura del sanchista Barbón. El candidato, por su parte, ha dicho estar «impresionado» por la acogida y ha mostrado su intención de «recibir con los brazos abiertos» a los votantes de López Se ha postulado igualmente como el candidato para los colectivos juveniles o feministas y muy especialmente para los sindicatos, con mención explícita al SOMA, muchos de cuyos representantes y afiliados se han desplazado hasta la Casa del Pueblo gijonesa. Para ellos han sido compromisos como el de apoyar la minería como «alternativa en la transición energética».

Adrián Barbón ha manifestado además su intención de hacer que el socialismo asturiano cobre protagonismo en el contexto nacional como «vanguardia de la transformación del socialismo español, enmarcar el proyecto de Asturias en el proyecto federal del 39 Congreso» y ha subrayado en varias ocasiones su sujeción a los principios socialistas de «redistribución de la riqueza y de la justicia». Pero también ha advertido que «el reto va a ser durísimo» y ha pedido a sus partidarios: «No os confiéis, todo está en contra nuestra». 

Pero sobre el candidato lavianés a la presidencia de la FSA ha recalcado sus vínculos con la militancia que le ha arropado en el inesperado fin de mitin en plena calle. Una escena que podría repetirse mañana a las 12,30 frente a la sede de la FSA, donde Barbón la ha convocado para que lo acompañe en el momento de presentar su ficha como precandidato, como puesta en escena de una convicción: «No me presento sino que me presentáis».