Los grupos municipales suscriben una declaración institucional para la erradicación de la violencia en las instalaciones deportivas locales y condenan el ataque de Cimadevilla
11 abr 2018 . Actualizado a las 11:35 h.Las instalaciones deportivas municipales -incluyendo el estadio de El Molinón- deberán impedir el acceso y la presencia de «hinchas violentos» en los encuentros deportivos de la ciudad. Así lo exigirá de forma genérica, y sin mencionar explícitamente el estadio sportinguista, la totalidad de los grupos políticos con representación en el Ayuntamiento de Gijón en la declaración institucional que se realizará durante la sesión plenaria de este miércoles y en respuesta al ataque de ultras del pasado fin de semana en Cimavilla. El texto consensuado condena además frontalmente esos hechos y cualquier otro acto violento en el contexto deportivo, y anuncia que el Ayuntamiento hará uso de sus competencias para evitar que eso suceda en los terrenos de juego locales. Reclama además la colaboración de otras entidades e instituciones, sin mencionar ninguna en concreto.
Con todo, los grupos de la izquierda municipal gijonesa -PSOE, XsP e IU- dejaban claro ayer durante su comparecencia conjunta para pedir la dimisión de Pelayo Barcia por unas polémicas declaraciones radiofónicas que la declaración no basta. Su petición de que las actuaciones enfoquen la situación como un problema que mantiene una continuidad en el tiempo, y en particular en los últimos dos años, difiere de la posición de grupos como el del PP, que ayer mostraban su disconformidad con la redacción en esos términos del encabezamiento de la declaración. En línea con las palabras del delegado del Gobierno, Mariano Marín, los populares gijoneses interpretan sucesos como el de la madrugada como «hechos aislados», frente a la consideración de actuaciones «sistemáticas» de los grupos violentos.
Ayer mismo, por otra parte, el Patronato Deportivo Municipal emitía también un comunicado de rechazo a este tipo de conductas.