El número de escolares que abandonan Gijón sin notificar su baja disparan el absentismo

J. C. G. GIJÓN

GIJÓN

un alumno en un aula, clase, vacía

De los 140 casos registrados en el curso 2017-18 -un tercio más que el anterior-, 31 corresponden a alumnos, sobre todo de Primaria que se trasladan del municipio o del país sin comunicarlo a los centros

11 oct 2018 . Actualizado a las 16:44 h.

Varón, alumno de primer curso de Secundaria de entre 12 y 14 años, repetidor, de nacionalidad española, vecino de los barrios de El Llano-Contrueces y miembro de una estructura familiar integrada por una madre con menores a cargo, bajo nivel educativo, en situación de vulnerabilidad económica y en paro. Ese es el perfil mayoritario detectado por la Fundación Municipal de Servicios sociales en su informe del curso 2017-2018 sobre absentismo escolar, cuyos datos revelan un incremento de más de un tercio de casos respecto al año anterior: de los 107 consignados en el anterior informe hasta los 140 de este año. Es una tasa del 0,64% sobre el total de alúmnos de colegios públicos y concertados del concejo, y supone un aumento de casi un 31 por ciento respecto al curso precedente. Pero la cifra está sujeta a importantes matices y que presenta un porcentaje del 40% de «evolución positiva» a lo largo del curso, aunque también un 26,4% de casos de «evaluación incierta», incluyendo los casos de alumnos y alumnas que se ausentan por traslado fuera del municipio, y a menudo del país, sin notificar su baja a los centros escolares. El pasado curso se dieron en Gijón, hasta 31 de estos casos, más del triple que en el año anterior, 21 de ellas en Primaria; uno de los datos más llamativos de entre los recopilados respecto al último curso escolar.

Es precisamente esta última circunstancia, junto a la mayor eficiencia en los mecanismos de comunicación de ausencias escolares, es una de las explicaciones para ese incremento de casi un tercio de casos que aportan los autores del Informe de Evaluación integrado en el Proyecto de Trabajo Socioeducativo en el Absentismo Escolar. Lo han elaborado los Servicios Sociales de Gijón con la participación las concejalías de Seguridad Ciudadana y de Educación, así como las consejerías de Educación y de Servicios y Derechos Sociales, sobre la base de la comunicación por parte de los centros de ausencias reiteradas y no justificadas que superen el un 20% de faltas mensuales y en las que las medidas establecidas en primer término por el centro educativo no han obtenido los resultados esperados. Descontados estos casos, son 109 los contabilizados, con una tasa del 0,5% del total del alumnado, mayoritariamente concentrada en Secundaria (0,83%) y con un incremento final del 13,5% sobre el curso 2016-17.

Mejora la evolución positiva

El estudio refleja asimismo una leve superioridad de los casos que «evolucionaron positivamente» sobre los que «la problemática se mantuvo»: un 40% y un 33,5% de los casos respectivamente. El resto, un 26,43%, tuvo «una evolución incierta» ya que las faltas disminuyeron pero el absentismo se mantuvo. Ese porcentaje incluye también los casos de traslado fuera del concejo sin baja comunicada a los centros. Los autores del estudio consideran que esos resultados «consiguen recuperar de nuevo una mayoría de casos con evolución positiva, así como un porcentaje de evolución negativa reducido, en comparación con cursos anteriores».

Más en Secundaria

El absentismo fue más frecuente en Secundaria, con 83 casos, siendo la tasa en dicha etapa educativa del 0,95%; mientras que en Primaria, con 57 casos, se obtuvo una tasa del 0,43%. Estas cifras suponen un incremento de las situaciones de absentismo comunicadas en comparación con el curso 2016/2017, en el que el número de casos fue de 107 alumnos y alumnas. Se produce así un incremento del 30,84% en las situaciones de absentismo comunicadas, en comparación con el curso pasado. El curso con mayor número de alumnado en situación de absentismo escolar fue 1º de la ESO, siendo la franja de edad más frecuente la de 12-14 años.

Más en El Llano-Contrueces

Respecto a la distribución de los casos de absentismo según las cuatro Zonas de Intervención del proyecto, la Zona D (Llano Contrueces) recibió el mayor número de comunicaciones (37,14%), mientras que la Zona C (Coto) fue la que recibió un menor número (14,29%).

Más los chicos

Por sexos, hubo un 53,57% de alumnos en situación de absentismo, frente a un 46,43% de alumnas, aunque la situación se invierte en el tramo de edad 15-16 años, en el que hubo más chicas en situación de absentismo. Respecto al origen del alumnado, un 68,58% corresponde a alumnado con nacionalidad española, frente a un 31,42% de origen extranjero.

Más repetidores

Por otra parte, en Primaria, el 45,61% del alumnado absentista realizaba el curso que le correspondía por edad, mientras que el 52,64% tenía un curso de retraso y el 1,75% dos cursos de retraso. En Secundaria, el 21,69% de este alumnado realizaba el curso que le correspondía por edad, frente a un 59,03% con un curso de retraso y un 19,28% con dos cursos. A su vez, en cuanto a la reiteración del absentismo, un 72,86% estaba en situación de absentismo por primera vez, mientras que el 27,14% restante contaba con historial de absentismo previo.

Situación familiar, académica y económica

La estructura familiar más frecuente en este alumnado corresponde a unidades familiares formadas por una madre con menores a cargo (49,56%), o bien a familias nucleares (40,87%). El nivel formativo más frecuente en las figuras parentales es bajo, predominando los "Estudios Primarios" en las madres (25%) y el "Lee y escribe" en los padres (21,05%). A su vez, son mayoritarias las situaciones familiares de fragilidad socioeconómica, afectando el desempleo a un 57,89% de padres y a un 74,11% de madres.

¿Y las respuestas?

Para corregir este cuadro, el Informe de Evaluación apunta hacia respuestas que implican actuaciones coordinadas desde los centros escolares y los Servicios Sociales Municipales, con apoyo de la Policía Local y de Inspección Educativa, así como de otros servicios municipales y autonómicos, junto con las entidades sociales que ofrecen apoyo a los y las menores y a sus familias en nuestra ciudad. El trabajo incide sobre todo en los «factores asociados, que pueden ser muy variados, pero que a menudo se relacionan con la desmotivación del alumnado o el retraso escolar, con problemas familiares que dificultan que las figuras parentales prioricen la escolaridad de los hijos o hijas, o con prejuicios culturales que no dan la importancia debida a la educación formal, entre otras causas».

Las reflexiones y propuestas desde los diferentes ámbitos implicados señalan hacia la importancia de conseguir una «detección e intervención temprana de las situaciones de absentismo, y la necesidad de mantener y fortalecer el trabajo de apoyo a las familias, también desde una línea preventiva».