La búsqueda del padre de una niña llamada Libertad

GIJÓN

Una familia francesa ha logrado reconstruir sus orígenes en Asturias para honrar la memoria de Aurora Fernández Barredo, exiliada del franquismo. Pero les falta una pieza: saber quién era y qué pasó con su marido, Angel García

25 may 2019 . Actualizado a las 21:59 h.

Aurora Fernández Barredo tenía 23 años cuando puso rumbo a Francia desde el puerto de El Musel. Había nacido en 1914 en Amandi (Villaviciosa) y era enfermera en el frente oriental de Asturias. Estaba afiliada al Sindicato Único de Sanidad de Gijón, la CNT, y había empezado a trabajar en el hospital republicano de Villaviciosa en mayo de 1937. Cuando abandonó Asturias, estaba embarazada. Ya tenía una hija que también se llamaba Aurora, que quedó al cuidado de sus padres en Amandi.

«Mi abuela salió probablemente de Asturias entre el 14 de septiembre y el 20 de octubre de 1937. Según algunos testimonios, salió de Gijón a bordo de un barco inglés, con destino a Francia, quizá Burdeos, acompañando a un grupo de niños evacuados», relata Daniel Fabia, uno de los cinco nietos de Aurora, que acabó refugiándose en Barcelona, en donde el 30 de abril de 1938 dio a luz a una niña a la que llamó Libertad. Durante «La Retirada», que es como se llama y se conmemora en Francia al masivo éxodo de españoles procedentes de Cataluña tras la caída republicana de Barcelona en enero de 1939, Aurora logró huir con su bebé cruzando los Pirineos y fueron recalando en diversos campos de refugiados hasta que falleció en uno de ellos, en Carcassone. Tenía 26 años y su niña se quedó sola.

«Huérfana con dos años, sin papeles y sin historia»

«Mi madre Libertad se encontró huérfana a la edad de dos años en Francia, sin papeles y sin historia. Llevamos muchos años investigando para encontrar nuestras raíces y reconstruir nuestra memoria familiar, animados por el deber de la memoria», explica Fabia. Libertad fue adoptada por una familia francesa que la crío como a su propia hija y le dio una infancia feliz. Su padre adoptivo había apuntado en un papel, que Libertad descubriría pasado el tiempo, varios nombres y fechas sobre sus orígenes: «Libertad. Pilar. Aurora Fernández. Ángel García. Villaviciosa. Cuenca minera».

«Así es como pudimos empezar la búsqueda de los orígenes de nuestra familia», indica Fabia, que explica que lo único que saben de su abuelo, el padre de Libertad, es su nombre y primer apellido: Ángel García. Y, por ello, aunque han conseguido rehacer parte de sus orígenes en Asturias, reencontrándose hace años incluso con la primera hija -que ya ha fallecido- de Aurora, no han averiguado nada más de Ángel García, aunque durante su larga investigación a través de los archivos de los lugares en los que estuvo Aurora tras dejar atrás Asturias han encontrado indicios que les llevan a Mieres. «No tenemos un segundo apellido y eso ha complicado enormemente la investigación», dice Fabia, que sigue confiando en encontrar respuestas en Asturias haciendo pública su búsqueda a través de La Voz de Asturias para darle un entierro digno a su abuelo y, quizá, encontrar a sus familiares.

Aurora dijo en Francia que su marido había sido fusilado

«En los documentos de la Casa de la Maternidad de Barcelona donde Aurora dio a luz declaró estar casada y que su marido había sido operado de una úlcera de estómago», indica. Si estaba o no casada no lo han podido verificar. Tampoco saben nada de su vida antes de la guerra civil. En Barcelona, Aurora había sido acogida en el refugio Lluis Companys y, cuando huyó con su hija a Francia, fueron enviadas por tren al norte de Francia. En los documentos de la Administración francesa que consultaron durante la investigación encontraron que Aurora había declarado que su marido había sido fusilado y que se llamaba Ángel García.

«Por el lado de mi abuelo es el vacío total. Tenemos esas declaraciones hechas por mi abuela en los documentos administrativos cuando llegó a Barcelona en 1938, cuando dijo en la casa de maternidad que estaba casada y cuando llegó a Francia, pero no hemos encontrado pruebas documentales de que fuera viuda ni de que mi abuelo hubiera sido fusilado», dice Fabia. Aurora y Libertad pasan por varios campos de refugiados desde febrero de 1939 hasta que Francia es ocupada por los nazis. En Cayeux-sur-mer, Roisel y Peronne. Sylvie Fabia, hija de Libertad y hermana de Daniel, pasó años buscando y recopilando información en todos los archivos posibles y hasta los de estas localidades acudió en busca de respuestas. En el de Roisel, descubrió que Aurora había pedido acercarse  Benito García Covelo, a quien en una carta de solicitud llama su hermano político y que entonces estaba en el campo de refugiados de Argelès para ir a México.

Emotivo reencuentro con la familia andaluza que coincidió con madre e hija

Daniel Fabia, que ha continuado la búsqueda de su abuelo sobre el exhaustivo trabajo de su hermana, dice que encontraron a familiares de Benito, que ya había fallecido, en Asturias y en México. «No tenían ningún recuerdo de mi abuela ni de su hija». En junio de 1939, madre e hija llegan al campo de Peronne y Aurora vuelve a pedir ese acercamiento con su «hermano político», que entonces se encontraba en el campo de Bernet. «Durante la estancia en Peronne, mi abuela simpatizó con un matrimonio de refugiados de Algeciras que tenía cinco hijos». Dieron con esa familia, de la que solo vivía uno de los hijos, Joaquín, y protagonizaron hace años un emotivo reencuentro. «Gracias a él supimos que mi familia había estado en Peronne y conseguimos algunas fotos de la época». La foto de Aurora con Libertad está hecha en Peronne, en 1940.

«Según nos contó Joaquín, las dos familias consiguieron salir de Peronne ya que los adultos habían encontrado trabajo, puede que en una fábrica textil, y se instalaron en Moislains». No encontraron archivos que certificaran el paso de Aurora por esta localidad, pero sí saben que, cuando las tropas alemanas invaden Francia, llegan al campo de refugiados de Argelès desde el que son evacuados al sur de Francia. El registro de entrada del campo de refugiados de Bram indica que Aurora y su hija llegaron el 29 de mayo de 1940. Cuatro meses después, Aurora fallece en el hospital de Carcassone. Su familia no ha podido encontrar sus restos, pues acabaron en una fosa común.

«Le cambiaron el nombre, poco correcto en España, por María Pilar»

«Nos fue imposible darle la sepultura digna que se merecía», indica Fabia. No obstante, una asociación memorialista creada por hijos de refugiados españoles, FRE39, instaló una placa conmemorativa hace unos años en el cementerio de La Conte, en el que fue enterrada Aurora, con su nombre y los del resto de españoles que corrieron su suerte. En Francia se honraba así su lucha por la libertad. Su familia francesa también hizo los trámites necesarios para que quedara constancia de la muerte de Aurora Fernández Barredo en el registro civil central de Madrid y en el de Villaviciosa.

Al fallecer Aurora, la familia andaluza se hace cargo de Libertad y, en 1941, son de nuevo trasladados al campo de Argelès, «probablemente debido al cierre del de Bram». En abril del mismo año, se encuentran en el campo de Rivesaltes, en donde un 10 de agosto se bautiza a Libertad como consta en los documentos que la familia ha ido recabando. Pero no la bautizan con el nombre que su madre le había puesto. «La familia que se hacía cargo de ella decide regresar a España y, con la intención de llevársela haciéndola pasar por su hija, decidieron bautizarla y cambiarle el nombre, poco correcto en aquel momento en España, por el de María Pilar».

Sin embargo, al final decidieron que se quedara en Francia por miedo a que fuera detenida y acabara en un orfanato. «Salieron del campo de refugiados en noviembre de 1941, dejando a mi madre con tres años y medio bajo la protección de un guarda del campo, que fue quien la adoptó». Libertad Pilar García Fernández pasó a ser la hija de una familia de Tarn-et-Garonne, cerca de Toulouse, y tuvo esa infancia feliz que, quién sabe, quizá no hubiera tenido en España.

La pista que les lleva a Mieres

Muchas décadas después de que su madre biológica falleciera, inició esta búsqueda de sus orígenes para honrar la memoria de sus padres con la ayuda de sus hijos. Les queda una pieza fundamental para cerrar esta gran historia. Encontrar a uno de los miles de desaparecidos de la guerra civil. Están convencidos de que el padre de Libertad era amigo, familiar o compañero de Benito García Covelo, que estaba casado con Amor Baragaño Areces y que efectivamente emigró a México después de un periplo similar al de Aurora por Francia. «Mi abuela le llamó hermano político, pero averiguamos que no había tenido hermanos. No sabemos si con hermano político se referiría a a que estaban en el mismo partido, pero lo que es seguro es que le conocía muy bien y estaba en contacto con él en Barcelona. Benito y su familia partieron de Burdeos rumbo a Santo Domingo. Mi abuela y mi madre deberían haberse unido a ellos, pero eso no sucedió…»

Benito, del que incluso han encontrado una mención suya en una crónica de 1934 del periódico de Gijón El Noroeste, había nacido en un pueblo de Orense en 1900 y había sido vecino de Ablaña, en Mieres. Benito era minero y se afilió con 18 años al Sindicato Minero. Y, con 21, al Partido Socialista. Según esa crónica de El Noroeste había sido detenido con otros compañeros por su participación en la revolución de octubre del 34. En 1937 era agente rural en el Cuerpo de Seguridad Nacional, en Villaviciosa.

Y, como Aurora cuando fue enfermera en varios hospitales militares de Asturias, también pasó por Llanes antes de ser jefe de destacamento en Luanco. A Barcelona había llegado en octubre de 1937, siendo también destinado en el Cuerpo de Seguridad. «Cuando dimos con sus hijas nos dijeron que había fallecido hacía muchos años y que era hijo único. Nos pusieron en contacto con una de las hermanas políticas de Benito, que vive en Mieres, y no tenía recuerdo alguno de mi abuela».

El orgullo de ser nieto de quienes «lucharon por la libertad y por la república»

Pese a todo, la familia de Aurora Fernández está convencida de que Benito tuvo relación con Ángel García, del que según testimonios piensan que conducía una camioneta, también que le llamaban el francés o incluso que podría haber sido escolta de un importante político local en las cuencas mineras.

«O era minero como Benito, o del mismo partido, o del mismo cuerpo de seguridad o era pariente de la mujer de Benito, aunque son solo suposiciones. Mi único orgullo es ser el nieto de Ángel y Aurora, que lucharon por la libertad y por la república. Ángel nunca sabrá qué ha sido de mi madre, que tuvo cinco hijos. ¡Yo mismo tengo seis hijos! Es una forma de responder a la barbarie de Franco», dice Daniel Fabia. Una de sus hermanas, Sabine Fabia, después de que su hermana Sylvie lograra encontrar a la hermanastra de su madre Libertad, vive en Asturias. En la tierra de sus abuelos, cuya historia ha sido rescatada del olvido gracias a su empeño por honrar su lucha por la libertad. Un nombre impensable para una niña en el franquismo...