Propuestas para acabar con la contaminación acústica en 5 años

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Tráfico en el barrio de El Llano de Gijón
Tráfico en el barrio de El Llano de Gijón

Más de la mitad de los gijoneses está expuesto a ruidos por encima de los 55 decibelios, el nivel que se considera molesto

31 may 2019 . Actualizado a las 09:25 h.

Reducir la contaminación acústica, a la que están expuestos la mitad de los gijoneses en niveles superiores a los 55 decibelios -el nivel en el que el ruido se considera molesto-, en un plazo de cinco años con medidas. La Coordinadora Ecoloxista d’Asturies, que ha presentado alegaciones a la modificación de la ordenanza contra la contaminación acústica del Ayuntamiento de Gijón que actualiza la de 2005, confía en que la nueva corporación del Ayuntamiento de Gijón tome medidas «sin demora» para atajar esta problemática que provoca serios daños en la salud de las personas.

Desde la Coordinadora recuerdan que el ruido tiene una buena cantidad de consecuencias para las personas y que, por ello, acumula una buena parte de los estudios sobre estrés ambiental. «Los efectos nocivos de la contaminación acústica son reconocidos en efectos fisiológicos y efectos psicológicos del ruido, por eso es necesario trabajar para su reducción más cuando se reconoce que el tráfico rodado es el mayor responsable de este grave problema en el concejo», indican, recordando que casi 60.000 gijoneses están expuestos a más de 65 decibelios y 115.000 lo están a 55 y 65 decibelios, el límite de esta contaminación.

«Sorprendente es también la situación de más del 50% de los centros docentes que tiene Gijón, de los que 54 presenten niveles sonoros por encima de los valores líoute para los indicadores de ruido ambiental, siendo gran parte de titularidad municipal», señalan, calificando también de «llamativa» la situación de los tres centros sanitarios, que superan los valores límite que establece el Real Decreto 1367/2007.

«Desde hace años en vista de la gravedad de la situación, venimos reclamando que con las competencias que tiene el ayuntamiento se desarrolle un ambicioso plan para reducir la contaminación acústica en el plazo de cinco años», añaden desde la coordinadora, que recuerdan que la nueva ordenanza -en periodo de información pública hasta el 3 de junio- establece tres franjas horarias con límites, que dependen también de los usos de las zonas, frente a la actual franja única que va de las 10 de la noche a las ocho de la mañana, «una modificación que queda alejada de pasar esta grave contaminación».

Por ello, proponen reducir los «generosos» límites para las horarios nocturnos para las diferentes zonas propuestas, «que nunca deberían ser superiores a los 45 decibelios donde haya viviendas, hospitales, centros de enseñanza o instalaciones deportivas, por lo tanto se debería reducir en los tres tipos de suelo que se proponen los valores más altos ya que no puede haber ciudadanos que sufran niveles de ruido diferente a la hora de descansar dependiendo de dónde vivan».

También se propone reducir el valor límite de las aulas y las habitaciones a 35 decibelios para los centros educativos y los centros hospitalarios para cualquier periodo, así como incluir en las zonas acústicamente saturadas aquellas industriales que tengan en su proximidad viviendas, centros de enseñanza, hospitales o instalaciones deportivas.

La Coordinadora Ecoloxista también alega que en las zonas actuales de saturación del nivel sonoro se tomen medidas especiales en un plazo de dos años para reducir los niveles de contaminación acústica y que se reduzca a seis meses el plazo para adaptarse de las actividades e instalaciones existentes para cumplir con los valores límite de ruido en las viviendas y locales colindantes y los niveles límite de inmisión al exterior establecidos en la ordenanza.