La asociación Atalía solicita que la Policía de Vigilancia Ambiental investigue el origen del hedor
15 oct 2019 . Actualizado a las 18:23 h.El escenario desde hace más de una semana es habitual en el barrio de El Natahoyo. Siete de la tarde. Una difícilmente soportable fetidez comienza a olerse en el aire y a invadir lentamente las aceras, hogares, negocios, bares y locales. A medida que avanzan las horas hacia la noche la peste se intensifica.
Y es que desde hace unos diez días los vecinos de la zona se quejan del «insufrible» olor que padecen, especialmente a última hora de la tarde y por la noche. El hedor se percibe con gran intensidad, de acuerdo con los habitantes de la barriada gijonesa, a lo largo de toda la avenida de Galicia e inmediaciones.
Álvaro Tuero, presidente de la asociación vecinal Atalía de El Natahoyo, destaca que el problema de malos olores ya había aparecido «hace años», y su origen estaba en las labores de cocción de los callos de una conservera situada en la zona industrial de Tremañes. «De aquella se logró hablar con ellos para que pusieran en funcionamiento la depuradora y los filtros. Aparentemente se había logrado paliar en parte», explica el portavoz vecinal.
En esta línea comenta que la situación empieza a hacerse difícilmente soportable «a partir de las siete de la tarde», por lo que va a proceder a «hablar con el Ayuntamiento y con la concejalía encargada de Medio Ambiente, porque hay unos días que el olor aparece con mucha virulencia». El presidente de la asociacion vecinal resalta que, si bien ahora el problema «podría venir de otra planta» de las ubicadas en Tremañes, todo hace indicar que el origen es el mismo que hace años.
Álvaro Tuero asevera que hay ciertos días en los que el hedor se vuelve «insufrible», algo que se percibe con preocupación incluso en varios de los establecimientos de hostelería y negocios de la zona, por el efecto negativo que esto podría tener en su día a día. En este sentido adelanta que va a solicitar que la Policía de Vigilancia Ambiental se persone en la zona para determinar el origen del hedor y tomar las medidas necesarias.