Gijón acoge el domingo el certamen Mis y Míster Real Model, en el que desfilan modelos que desafían los cánones de belleza impuestos por la sociedad
25 oct 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Los cánones de belleza imperantes en las diferentes épocas no son más que otro de los muchos yugos que una minoría impone al resto de la sociedad para determinar qué o quién es o no aceptable. Al fin y al cabo, lo que es agradable o no a la vista depende siempre del color del cristal con el que uno mira a la realidad. Romper la tiranía de lo establecido, aumentar la autoestima de los participantes y mostrar la belleza de la diversidad son los objetivos con los que este domingo se celebra a las siete de la tarde en el hotel Tryp Pelayo de Gijón el certamen Miss y Míster Real Model.
Carolina Pérez es la organizadora de la segunda edición de este evento, «que quiere dar voz a todas aquellas personas que sufren y que tienen miedos o vergüenza por no acercarse al canon de belleza establecido por la sociedad… Hay chicas y chicos que han pasado por situaciones de insultos, miedos o padecido anorexia», explica.
«El evento en Asturias tiene dos años y nace de la idea de un grupo de mujeres y amigas, algunas de las cuales desfilaban anteriormente en eventos», añade. Muchas de las participantes son modelos «de talla grande». «Siempre existe esa falsa creencia de que las chicas curvy no tienen cabida en el mundo de la moda», resalta, si bien apunta que también tomarán parte modelos de tallas estándar. Desde su punto de vista «se trata de mostrar a hombres y mujeres reales en tres categorías, desde la chica de una talla 34 que tiene problemas para encontrar ropa hasta la que lleva una 60. No hay límites de talla, altura,…»
«Quisimos hacer un certamen porque nos encontramos que hay mujeres con miedos, problemas e inseguridades a causa de estos cánones. Es un problema muy grande que la sociedad no ve», recalca. En el desfile participan 21 mujeres y siete hombres y se espera la asistencia de 200 personas. Pese a reconocer que «económicamente no se gana nada», Carolina Pérez resalta la satisfacción que se siente al ver que «ellas ese día son tan felices». Para ella es esencial el papel que juegan «las tiendas y colaboradores que nos echan una mano de manera desinteresada y gratuita».