«La peatonalización del Muro es reversible, otra cosa es que a mí me gustaría que fuera definitiva»

E. G. B. GIJON

GIJÓN

La alcaldesa de Gijón, Ana González Rodríguez
La alcaldesa de Gijón, Ana González Rodríguez

La alcaldesa de Gijón explica a la plataforma Stop Muro que las obras responden a la necesidad de tener «lugares agradables» para pasear y encontrarse con la prevención que exige la pandemia de covid-19

12 ago 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Las obras de peatonalización del Muro de San Lorenzo responden a la situación excepcional que ha traído consigo la pandemia de coronavirus y, en este sentido, a la necesidad de generar «espacios agradables para estar, para caminar y para encontrarnos» manteniendo la distancia de seguridad ante la posible propagación del un virus tan contagioso como el SARS-CoV-2. Pero esas son «reversibles», como indicaba ayer, al término de la reunión mantenida con la plataforma Stop Muro, la alcaldesa de Gijón, Ana González.

«Las pequeñas intervenciones que se están realizando son para tener un sitio decente y tan agradable como el entorno de la playa de San Lorenzo en el que poder estar guardando la distancia de seguridad. Es una actuación provisional y reversible, ya que dependerá de las decisiones de futuro que se tomen sobre el Muro», explicó.

Eso sí, «otra cosa es lo que a mí me gustaría, que lo he dicho muchas veces, y es que el muro fuera definitivamente peatonal, pero no estamos en esa fase», añadió, insistiendo en que, en el momento actual, en el que hay que seguir manteniendo las medidas de seguridad que exige la pandemia de una enfermedad sin vacuna ni tratamiento eficaz por el momento. «Por ello necesitamos esos espacios y es lo que estamos haciendo para tener ese lugar de encuentro mientras dure la inestabilidad de la pandemia», explicó la alcaldesa, que valoró de manera positiva un encuentro que, según dijo, le permitió escuchar de primera mano «opiniones, miedos e intereses» de «mis vecinos».

Al encuentro con miembros de esta plataforma ciudadana también asistieron los concejales de Desarrollo Urbanístico, José Luis Fernández, y de Medio Ambiente y Movilidad, Aurelio Martín, respectivamente. Este último indicó que los datos recabados por la Jefatura de Tráfico «nos dicen que en algunas calles adyacentes al Muro hay una intensidad de tráfico un poco mayor algunos días y a determinadas horas, fundamentalmente a última hora de la mañana y de la tarde». En todo caso, explicó, esa mayor intensidad de tráfico rodado con respecto al año pasado «es perfectamente asumible por la capacidad que tienen estas vías y equiparable a la que pueden tener otras ciudades o pueblos costeros en el mes de agosto».

La plataforma Stop Muro, que el próximo viernes 14 de agosto ha convocado una protesta en la plazuela de San Miguel, se constituía recientemente para solicitar al Ayuntamiento de Gijón que reponga la circulación tanto en la calle el paseo del Muro como en la avenida del Molinón. Según indican en su perfil de Facebook, consideran justificadas las medidas adoptadas en la circulación como consecuencia de la covid-19 y de las obras del colector de la avenida del Molinón, «pero creemos que tras la situación excepcional que han supuesto ambas, el tráfico rodado en ambas vías ha de volver a la situación anterior».

También abogan por que las medidas que se adopten «sean integrales, estudiadas en el conjunto de la ciudad, y que se ofrezcan alternativas, parkings disuasorios y mejoras en el transporte público y no simples parches, todo ello dentro de un plan municipal, con la mayor participación ciudadana y consenso político» para combinar un tráfico fluido con zonas peatonales libres de vehículos. 

Por su parte, ayer el concejal de Podemos-Equo Juan Chaves criticaba precisamente al gobierno local por no haber «hecho pedagogía» para explicar las obras de urbanización del Muro de San Lorenzo. «A pesar de compartir la esencia de la propuesta de recuperación de espacio público para el ciudadano, como la ampliación del carril-bici, se echa en falta información que hubiera ayudado hacer las cosas con un poquito más de calma», consideró.

En este sentido, explicó que «no se trata sólo de explicar que se va a hacer una obra, sino qué va a suponer, por qué se hace y los beneficios que va a reportar». En su opinión, además, «una transformación de este calado necesita ser dialogada previamente y hacer pedagogía con la ciudadanía, agentes sociales, federaciones de vecinos y comerciantes, algo que no se ha producido y por eso se están generando estas controversias y debates». Tampoco le parece que agosto sea el mejor momento para iniciar una obra de este tipo.

Desde Foro, críticos con esta obra, también consideraban ayer «inadmisible» que la avenida del Molinón se mantenga cerrada nueve meses después de anunciada su reforma y peatonalización, y que «no se conozca ni el proyecto, ni la duración, ni quién acometerá las obras». «Entre el Muro levantado en pleno agosto con maquinaria pesada trabajando, la avenida del Molinón cerrada a cal y canto y el abandono del parque de Isabel la Católica, la imagen de esta zona resulta desoladora», criticó el edil de Foro Jesús Martínez.