Ceares urge al ayuntamiento mejoras en la sede vecinal

Marcos Gutiérrez GIJÓN

GIJÓN

Sede del antiguo hogar del pensionista de Ceares
Sede del antiguo hogar del pensionista de Ceares Marcos Gutiérrez

Los vecinos del barrio también claman por una solución para el antiguo edificio del hogar del pensionista ante el grave riesgo de desplome por el paso del tiempo

18 ene 2021 . Actualizado a las 13:27 h.

El populoso barrio de Ceares afronta 2021 con una serie de retos y necesidades innegociables que, a causa del yugo impuesto en 2020 por el coronavirus, quedaron en cierta medida en espera. La vicepresidenta de la asociación de vecinos de Ceares, Pilar Ruiloba, explica que hay dos cuestiones fundamentales que quitan el sueño al colectivo. Por un lado, la necesidad de contar con una sede adecuada en la que llevar a cabo sus talleres y actividades.

La segunda de esas preocupaciones es la que concierne al estado de la antigua sede de la asociación vecinal y hogar del pensionista. El inmueble tiene los días contados, pues en 2018 se aprobó su derribo. Este año los presupuestos municipales cuentan con partidas destinadas a este propósito. No obstante, desde la entidad se teme que antes de que esto suceda el edificio colapse por la acción del paso del tiempo. A este miedo se une la inquietud por el bienestar de tres personas que ocupan las instalaciones abandonadas desde hace un tiempo.

Pilar Ruiloba indica que lo que precisan «desde 2002 es un hogar para los vecinos, algo por lo que llevamos peleando desde entonces». Asimismo, cree que «hay zonas verdes muy abandonadas, que no vienen ni a segarlas». «Hay un parque al lado de la sede de la asociación para el que pedimos la instalación de máquinas de gimnasia activa», recuerda.

Insiste en que Ceares es «un barrio en el que vive gente muy mayor. Cuando llueve los vecinos mayores no pueden salir de casa. En la sede realizamos muchas actividades de memoria, teatro, costura, baile o informática, que no podemos llevar a cabo como querríamos por falta de sitio. Además tenemos muchas humedades».

«Luego ves que para otras cosas sí hay dinero», lamenta. Respecto a la antigua sede del pensionista, la vicepresidenta de la asociación de vecinos comenta que las tres personas que viven ahora mismo en su interior «empezaron pernoctando en la puerta» hace apenas un mes. Cree que existe un claro riesgo «de que se queden allí enterrados. De hecho, el techo de lo que era el salón de actos ya cayó».