Este proyecto es el primer chatbot que permite a los vecinos y turistas un acercamiento pleno al patrimonio, historia y personajes de la ciudad. Todo ello de manera interactiva y a través del WhatsApp
26 sep 2021 . Actualizado a las 05:00 h.Chatín es el primer chatbot que permite a los gijoneses y personas que visitan la ciudad un acercamiento pleno al patrimonio de la ciudad. El proyecto piloto, activo hasta el 31 de octubre, recibió financiación de Gijón Impulsa en 2020, en el marco de sus incentivos a la innovación, y fue desarrollado en el marco de una residencia Laboral Impulsa, en Laboral Centro de Arte y Creación Industrial.
El sistema ya tiene dos rutas interactivas. El sistema no precisa la instalación de ninguna aplicación extra, sino que se utiliza a través del WhatsApp diciendo ‘hola’ al número 613 00 99 80. Chatín formará parte del catálogo de la noche blanca de Gijón, que se celebra este viernes. El proyecto nace con el objetivo de potenciar la oferta de los Destinos Turísticos Inteligentes.
El público usuario de este servicio recibirá contenido didáctico e interactivo sobre elementos del patrimonio y la historia del lugar de manera automatizada e inteligente. En este momento, Chatín ofrece una primera ruta interactiva de una hora por el barrio de Cimadevilla. En ella se ponen a prueba los conocimientos sobre la zona del usuario a través de una yincana que comienza en el Ayuntamiento.
La segunda es una ruta por la historia, que a través de audios de WhatsApp va contando anécdotas y curiosidades de la zona centro de la ciudad, de sus personajes más ilustres y edificios más emblemáticos. Esta es una ruta circular, para la que Chatín reconoce la localización del usuario y sugiere el punto más cercano desde el que iniciar el paseo. Estas rutas se pueden hacer de manera individual o en grupo, pudiendo hacer pausas entre las pruebas y retomar el juego más adelante, puesto que la conversación queda registrada. Entre otras, Chatín tiene la capacidad de adaptar y personalizar sus respuestas en función de las reacciones del público usuario.
Además, puede reconocer imágenes, así como la localización, fecha y hora en que su interlocutor está realizando la ruta, en función de lo cual puede desviarle hacia destinos diferentes. Una ruta, por ejemplo, podría o no incluir la visita a un museo cotejando la hora a la que tiene lugar la conversación y los horarios de apertura del centro.
«Este proyecto piloto ofrece múltiples posibilidades de expansión, desde la creación de rutas específicas para eventos, espacios cerrados, exposiciones… hasta la adaptación de rutas patrimoniales en otras ciudades o zonas rurales, en otros idiomas o para públicos de diferentes edades. Se trata además de una herramienta de utilización sencilla, ya que alrededor del 90% de usuarios de teléfonos móviles ya tienen instalado WhatsApp», señala Horacio García, fundador de Chatín. Entre otras ventajas, García destaca el valor añadido para los lugares que aspiran a consolidarse como DTIs, el apoyo al comercio de proximidad, y la promoción de la cultura y el patrimonio de manera activa, saludable y al aire libre, tanto para visitantes como para residentes.
La intención de los promotores de este Chatbot es venderlo y extender sus usos más allá de los actuales. «Las posibilidades son infinitas», destaca Alexandra Gil. En este sentido añade que «se puede usar para una visita de un museo, estilo audioguía», trasladarlo a otras ciudades, crear más rutas en Gijón y habilitar «una especie de agenda cultural».
También se puede aplicar, por ejemplo, a un «retiro con trabajadores a través de un juego para una empresa privada». El hilo conductor es que estas aplicaciones estén enfocadas en cierta medida de manera eminente «a la cultura y el patrimonio». Considera que con Chatín «jóvenes y adolescentes se van a acercar más a la cultura».