Roba un móvil en un karaoke, se atrinchera en el baño y amenaza a la víctima con una navaja

La Voz

GIJÓN

La Policía acudió al local tras la denuncia de una mujer, el ladrón había escondido el teléfono en un calcetín

19 oct 2021 . Actualizado a las 14:44 h.

Agentes de la Policía Nacional han detenido a un hombre que fingió ligar con una joven en un karaoke de Gijón para sustraerle el móvil. Cuando la mujer se percató de la sustracción y exigió la devolución de su terminal la amenazó con una navaja para que dejara de insistir.

Según ha informado la Policía, los agentes acudieron a las 4 de la madrugada del viernes a un karaoke del barrio de la Calzada alertados por un mujer que daba cuenta de que un hombre le había quitado su móvil y la había amenazado con una navaja cuando le había pedido que se lo devolviera.

La víctima explicó que cuando estaba charlando con unas amigas en la barra se acercó a ellas un hombre que fingió estar interesado en conocerlas y quiso entablar conversación, pero como ellas lo ignoraron, se marchó apresuradamente a la zona de los aseos. La actitud de esta persona y su proximidad les resultó sospechosa por lo que comprobaron sus pertenencias y fue cuando se percató de que su móvil había desaparecido.

Según relata la Policía, de inmediato la mujer se acercó a los baños para pedirle el terminal pero lejos de devolvérselo, la amenazó con clavarle una navaja si llamaba a la policía o avisaba a sus amigos.

Un cliente del local, testigo de los hechos, alertó a la Policía Nacional cuyos agentes se personaron de inmediato para asistir a la víctima de la sustracción. Según las indicaciones de los presentes, el autor continuaba en los aseos por lo que los actuantes lo identificaron en ese lugar y localizaron el teléfono móvil de la víctima escondido en el interior de uno de sus calcetines. También encontraron el arma esgrimida contra la mujer tirada en el suelo de uno de los retretes, arrojada detrás del inodoro con la intención de que los agentes no pudieran encontrarla.

El arrestado, vecino de Gijón de 37 años de edad contaba con medio centenar de detenciones anteriores por delitos contra el patrimonio tales como robos y hurtos y malos tratos en el ámbito familiar.