Ratifican la prisión para el Padre Chus por tráfico de drogas y corrupción de menores

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La jueza del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Gijón ha afirmado la medida que ya había sido impuesta por el juzgado de guardia

17 nov 2021 . Actualizado a las 16:52 h.

Una jueza de Gijón ha ratificado este miércoles la prisión provisional, comunicada y sin fianza del exsacerdote Jesús María Menéndez, conocido como Padre Chus, por su presunta autoría en sendos delitos de corrupción de menores y contra la salud pública. A través de un auto, la magistrada titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Gijón ha acordado ratificar la medida impuesta por el juzgado de guardia el pasado domingo tras el acto de comparecencia celebrado esta mañana.

La jueza titular continuará así la investigación de la causa abierta contra el exsacerdote acusado de sendos delitos de corrupción de menores y tráfico de drogas desde su domicilio en la calle Donato Argüelles de Gijón, donde fue detenido y donde se llevó a cabo un exhaustivo registro policial. La Fiscalía había pedido el ingreso en prisión del exsacerdote al considerar que existe riesgo de fuga, reiteración delictiva y destrucción de pruebas.

El conocido como Padre Chus fue expulsado en 2015 del clero en una decisión adoptada directamente por el Papa al considerar que había llevado a cabo acciones pecaminosas y contra el Derecho Canónico por presuntamente abusar sexualmente de adolescentes de 17 años. Aunque en España las relaciones sexuales están consentidas a partir de los 16 años, la normativa de la Iglesia fija como delito todas aquellas que se producen antes de los 18 años.

El Padre Chus publicó una carta abierta en la que expresaba su «dolor» y «tristeza» por verse «condenado de forma tan injusta». En aquella ocasión, Menéndez lamentó su indefensión al no haber podido aportar los testimonios de las personas a las que, según explicaba, había ayudado y con las que había compartido «techo y mantel, pero no cama», y «que aseverarían sin duda la falsedad de las gravísimas acusaciones». No obstante, todas las denuncias fueron posteriormente archivadas.

El excura había sido párroco, hasta que fue suspendido de forma preventiva, de Castiello de la Marina, en Villaviciosa, y anteriormente lo había sido en otras localidades asturianas como Tazones, Argüero y Oles. Además, había ejercido como profesor de religión y regentado una casa de acogida para extranjeros con dificultades en Gijón, informa Efe.