El ayuntamiento otorga también las medallas de plata a la trabajadora municipal Felisa Soria, la compañía Quiquilimón y la Fundación Alpe
27 may 2022 . Actualizado a las 13:08 h.El pleno del Ayuntamiento de Gijón ha concedido este viernes la medalla de oro de la ciudad al Centro de Educación de Personas Adultas de Gijón (CEPA) por haberse convertido en un «instrumento fundamental» para la formación de personas de cualquier edad y situación social apostando por la integración frente a la exclusión.
El Centro de Educación de Personas Adultas de Gijón, que nació hace cuarenta años, ha desarrollado una «tarea imprescindible» en una ciudad educadora y ha logrado consolidar la educación permanente al servicio del «aprendizaje a lo largo de la vida», algo recogido en el objetivo 4 de la Agenda 2030 de Naciones Unidas, ha glosado la alcaldesa, Ana González.
El mayor centro público de aprendizaje permanente de Asturias se ha convertido en un «instrumento fundamental» para la formación de las personas de cualquier edad y situación social, la integración frente a cualquier forma de exclusión, la igualdad de oportunidades para acceder al mundo laboral y la mejora de la calidad de vida de la ciudadanía.
«Cuarenta años hay detrás de trabajo y esfuerzo, de formar en ciudadanía, de intentar superar las brechas sociales y avanzar en esta sociedad del conocimiento siempre dirigiéndonos a los grupos más vulnerables», ha afirmado la directora del CEPA Julia Magdalena García, quien ha destacado que el punto fuerte de CEPA es el título de secretaría, ya que es algo «básico» de cara a la inserción laboral.
Una de las medallas de plata ha recaído en Felisa Soria por su dedicación al fomento de la educación popular y la participación como palancas para la formación de una ciudadanía libre y crítica y su aportación a la igualdad entre hombres y mujeres.
Soria, que ahora trabaja en la dirección general de servicios del Ayuntamiento, considera que las políticas de igualdad han sido «lo más apasionante, todo un reto», sobre todo el trabajo con los colectivos sociales y las mujeres que le ha permitido acercarse a la «realidad tan dura» de la violencia de género.
También ha recibido la medalla de plata la Compañía de Teatro Quiquilimón por su esfuerzo en la defensa y la promoción de las artes escénicas, su contribución a revitalizar la tradición del Antroxu gijonés, su aportación a la cultura de base de la ciudad y por su entusiasmo y el tesón personal y profesional.
Chus Casado, de Quiquilimón, ha relatado que lo que comenzó como una afición se acabó profesionalizando y a lo largo de su trayectoria ha organizado espectáculos en los que había mensajes subliminales que buscaban que «los espectadores reflexionen y se identificasen con algún personaje» para tener una reacción para sus vidas.
La Fundación Alpe Acondroplasia ha sido la tercera galardonada con la medalla de plata por convertirse en una activa promotora de encuentros, congresos, reuniones y jornadas nacionales e internacionales haciendo de Gijón referencia mundial y promocionando asimismo su actividad como destino de encuentros.
«Esta medalla cruza el charco», ha asegurado la directora de Alpe Acondroplasia, Carmen Alonso, que ha explicado que la medalla sirve para dar visibilidad en todo el mundo ya que trabajan más allá de España.
«Las Medallas de la Villa dibujan una constelación de valores que orientan la ciudad que ya somos y la que queremos ser aún más», ha asegurado la regidora, quien ha hablado de una urbe donde la igualdad de derechos es «el suelo, el cimiento y el horizonte», donde hay igualdad entre hombres y mujeres y de acceso a la formación y el empleo.
Una ciudad que no excluye a sus vecinos, que integra y suma y donde los ciudadanos se implican a través de sus empresas, ha destacado la alcaldesa, quien ha remarcado que los premiados hacen gala de estos valores a diario, informa Efe.