Aprovecha los ingredientes de tu nevera hasta el último gramo para que lo que sobró ayer no acabe en la basura

Cada día una enorme cantidad de alimentos va directamente de nuestras mesas al cubo de basura. ¿Cuántas veces has preparado filetes y te ha sobrado uno?, ¿o te has preguntado qué hacer con ese tomate que se ha quedado huérfano en el fondo de la nevera? Antes de dirigirte al cubo de basura, es hora de pensar una alternativa para todas esas sobras. Un trozo de pan, unas legumbres de hace dos días o unos restos de carne pueden tener una segunda vida y convertirse en un nuevo y apetecible plato. Estamos hablando de la cocina de aprovechamiento, esa en la que nuestras abuelas eran auténticas expertas y que, en los últimos años, se ha puesto de moda en programas de cocina como «MasterChef» e, incluso, entre los grandes cocineros.

Ya lo decían nuestras abuelas, ¡en esta casa no se tira nada! Porque tratar de reutilizar ingredientes supone un ahorro de dinero en la lista de la compra y también ayuda a la conservación de nuestro medio ambiente. No es difícil, solo es necesario un poco de ingenio.

Carne, un mundo de posibilidades

Pollo, ternera o cordero son algunas de las carnes que más solemos cocinar, y también son los productos con los que conseguiremos algunos de los platos de aprovechamiento más interesantes. Aquí el plato estrella son las croquetas, pero si preferimos evitar los fritos, podemos optar por unas hamburguesas diferentes o un menú más exótico con unos deliciosos burritos mexicanos: coge unas cuantas verduras, mézclalas con la carne, rellena tus tortitas y aliña con una buena salsa picante o un poco de guacamole. Y si te sobra algo de cordero, no dudes en probar esta receta de lasaña en la que la pasta se sustituye por verduras.

Aprovecha hasta el último resto de pescado

Con los alimentos de mar nos suele costar más idear nuevas recetas para evitar que los restos acaben en la basura. Sin embargo, es cuestión de pensar un poco. Además de las ya mencionadas croquetas, puedes optar por preparar un pastel de pescado. Esta idea sirve para cualquier resto cocinado que tengas en la cocina, así podrás darle un aire nuevo y disfrutarlo sin tener la sensación de estar comiendo lo mismo. Un paté para untar también puede ser una forma muy sencilla y distinta de aprovechar, por ejemplo, esa lata de atún que abriste hace un par de días.

Pan, ¡que no queden ni las migas!

No te deshagas del pan del día anterior. Con unos cuantos trocitos podrás hacer unas migas, un delicioso pudin o unos picatostes o «croutons» para tus cremas y ensaladas. Y cuando el pan se ponga muy duro puedes rallarlo y utilizarlo para empanar otros alimentos.

Aleja del cubo de basura las frutas y verduras muy maduras

¿Las verduras están poniéndose mustias? No pasa nada, esta receta de flan de verduras te ayuda aumentar tu consumo de hortalizas y a provechar cualquier resto que tengamos olvidado en la nevera. Además, obtendrás un plato saludable, rápido y muy económico. Y si lo que se está estropeando son frutas, prepárate un saludable batido o una salsa para aliñar tus ensaladas o acompañar carnes y pescados.