Lo que calla Oprah Winfrey

Sandra Faginas Souto
Sandra Faginas MIRA Y VERÁS

OPINIÓN

16 mar 2021 . Actualizado a las 09:02 h.

Después de ver la entrevista de Meghan y Harry, tengo que decir que con lo que me quedo es con Oprah. No es que no me haya interesado todo lo que los duques de Sussex han soltado por esa boca, pero a mí la vista se me iba a esa señora que sin un papel en la mano, con toda la naturalidad, iba enlazando una pregunta tras otra como si realmente estuvieran en el salón de casa tomando café. No hay ni un pero a sus cuestiones, intervino en todos aquellos aspectos que ardían en la polémica y se atrevió a poner, en ese estilo tan americano, todas las caras de sorpresa que iban surgiendo. Nada tiene que ver esta entrevista con la de Diana con Martin Bashir, en esa más protocolaria y formal distancia de llevar todos los papeles encima. Oprah Winfrey hasta por momentos parecía repanchingada en la silla, frotándose las manos en ese ‘venga, seguid contando mientras os pongo unas aceitunitas’. En chándal y entre gallinas, los espectadores no hemos percibido ningún tipo de tensión, todo lo contrario, en ese trío de vecinos que ya ha quedado para la historia mediática. Por eso la que desde luego merecería una entrevista ahora es Oprah, ella y solo ella sabe que, aunque no haya habido preguntas pactadas, como se aclaró al comienzo del programa, hasta llegar a este punto de entendimiento ha habido que echarle muchas horas de trabajo al asunto para contar un único punto de vista. Oprah, desde luego, no puso ni un solo reparo a las palabras de Meghan y Harry. Ella solo preguntó. Pero a saber lo que calla.