La presión

OPINIÓN

Simone Biles (Estados Unidos) durante la final femenina de gimnasia artística
Simone Biles (Estados Unidos) durante la final femenina de gimnasia artística DAMIR SAGOLJ | REUTERS

30 jul 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Antes de irse de vacaciones, el Presidente del Gobierno ha citado en Salamanca a  todos los presidentes autonómicos para hablar de diferentes temas, como son la campaña de vacunación, el Plan de Recuperación y Resiliencia de los fondos europeos y la Estrategia para el Reto Demográfico. Sin duda alguna son asuntos de capital importancia que exigen de la colaboración de las diferentes administraciones. Lamentablemente faltará a la cita Pere Aragonés (en una nueva muestra de la falta del sentido institucional que el nacionalismo catalán carece) y en las filas del PP se ha anunciado que será la última ocasión a la que asistirá Ayuso. La actitud de ambos dirigentes parece responder más a presionar al Gobierno español que a manifestar una opinión discordante. A mi juicio, este tipo de cumbres son mucho más que para una foto protocolaria o para el minuto de gloria de cada presidente, y con lo que se va a tratar además me parece elemental que haya voz y voto para todas las ideas, aunque lo ideal es que se llegue a consensos en beneficio del conjunto de la ciudadanía española.

Seguro que todos nos hemos sentido alguna vez presionados, con ganas de tirar la toalla y con la autoestima baja. La lección que nos ha dado Simone Biles creo que es de admirar por su valentía. Lo primero es la salud, y concretamente la mental, por encima de un éxito al que la sociedad casi nos obliga a lograr. Es evidente que para un deportista que quiere ir a unos Juegos Olímpicos su meta no es la de participar, pero el problema es que no nos educan para ganar, sino para sobrepasarnos. Además, el deporte profesional requiere un esfuerzo físico tan grande que solamente la mente puede ponerle freno, y para tomar esa decisión hay que sentirse bien, feliz y conforme a lo que uno puede aspirar. Las imágenes de los deportistas abatidos no ya por no ganar, sino por llegar al mínimo objetivo marcado, son muy frecuentes y el estar expuestos ante tantos ojos imagino que les difícil aguantar las emociones y el tipo.

Perú tiene nuevo presidente. Pedro Castillo ha levantado muchas esperanzas en dar por fin un vuelco a la trayectoria política del país. En su discurso de investidura ha prometido unir al país, que en las últimas elecciones dejó claro que está totalmente dividido. Espero que tenga muy presente su origen humilde aunque soy consciente de que la presión internacional, y particularmente la estadounidense, limita mucho la capacidad de acción de los gobernantes de izquierdas.