¿Harías clic en un vídeo aunque pudiera costarle la vida a una persona?

OPINIÓN

02 oct 2021 . Actualizado a las 21:49 h.

Las visualizaciones cotizan al alza, hoy en día quien las recibe es millonario. Los clics se han convertido en el sentido que mueve parte de nuestro mundo. Pinchamos porque la inercia, que las nuevas tecnologías han depositado en nuestras manos, nos dirige sin tiempo para pensar, y enfilamos más aun esos pinchazos cuando están camuflados para que la curiosidad impere por encima de todo. Como ocurre con el vídeo de Nick Brewer (Clickbait, Netflix) donde aparece ensangrentado y con un cartel en el que se lee: «A las 5 millones de visualizaciones moriré». Es inevitable, el contador sube como la pólvora. La curiosidad y el morbo poco a poco van acabando con la vida de este padre de familia, al que se le juzga mucho antes de lo debido. Los prejuicios también imperan en esta sociedad en la que cada día vale menos eso de ‘soy inocente hasta que se demuestre lo contrario'. No obstante, hay indicios de que está ocultando algo: no pasa por el mejor momento en su matrimonio y en la última conversación con su hermana perdió los papeles. El guion atrapa al espectador desde el primer momento y ese enganche se mantiene a lo largo de los ocho capítulos de esta miniserie. La tensión emocional es constante, cuando crees saber quién está detrás del macabro juego, un nuevo giro desbarata y tira por tierra todas las conclusiones. Resulta complicado leer la sinopsis, ver el tráiler y no pinchar.