Un portero encuentra un cadáver en el cuarto de la basura de un bloque de Salesas

Pilar Campo OVIEDO

OVIEDO

El portal donde ha aparecido el cadáver
El portal donde ha aparecido el cadáver

El cuerpo, de un varón de 59 años, presentaba signos de violencia. La Policía se ha trasladado al centro comercial para abrir una investigación

26 jul 2018 . Actualizado a las 12:35 h.

El cadáver de J.M.F.V., de 59 años y vecino del inmueble número 8 de la Plaza Primo de Rivera, en Oviedo, fue descubierto en el cuarto de basuras, en el sótano del edificio de Salesas, por el portero, José Riera. El cuerpo presentaba signos de violencia y fue levantado por una comisión judicial, integrada por el juez de guardia, el médico forense, la Policía Judicial y la Policía Científica, personada en el edificio a primera hora de la mañana. El juzgado que ha asumido la instrucción de la causa ha decretado el secreto de las actuaciones.

En el edificio donde apareció el cadáver residen 297 vecinos que se enteraron del fallecimiento por la presencia policial  y judicial. La mayoría no conocían personalmente al fallecido, ni a su pareja sentimental. Se da la circunstancia de que el ahora fallecido había encontrado muerta a su novia, encima de la cama del domicilio conyugal, el pasado viernes, según pudo saber La Voz de Asturias en fuentes solventes.

«Me llevé un buen susto», declaró José Riera, abrumado ante las preguntas de los periodistas que se concentraron, nada más conocer la noticia del hallazgo del cadáver y que, casi sobre la marcha, iban informando a los vecinos de la muerte de J.M.F.

Uno de estos vecinos es Francisco José Enguidanos Solís, quien había salido a correr a las 7.30 de esta mañana cuando coincidió con la llegada de los agentes policiales. «Había dos grupos de policía nacional. No sabía que pasaba. En ningún momento pensé que se trataba de una muerte y menos violenta».

Apenas llevaba un mes residiendo en el inmueble y no conocía a la pareja. En su misma situación se encontraban otros vecinos, del edificio que creían que se trataba de un «lío de los habituales donde hay casas de citas y luego resulta que era una persona que vivía en el mismo portal», explicaban.