El condenado asegura que no quiso hace daño a la víctima y que actuó en defensa propia
22 mar 2018 . Actualizado a las 16:34 h.El acusado de intentar matar con una navaja a un hombre, con el que se había citado en Oviedo para que le devolviera unas llaves, ha reconocido los hechos y ha aceptado una pena de cinco años de prisión. El juicio estaba señalado esta mañana en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial, aunque el acuerdo entre las partes ha evitado su celebración.
La Fiscalía considera que los hechos son constitutivos de un delito intentado de homicidio y de otro leve de daños, y pedía inicialmente una condena de siete años de cárcel y ocho de alejamiento, así como el pago de una multa de 540 euros, una indemnización de 3.960 euros a la víctima y de otra 4.177 euros al servicio de salud por los gastos sanitarios. Sin embargo, la defensa ha conseguido rebajar dos años la pena de prisión y el pago de la multa a 120 euros, aunque manteniendo las indemnizaciones a la víctima y al servicio de salud y los ocho años de orden de alejamiento. El acusado, que ha ejercido el derecho a la última palabra, ha declarado que no quiso hacer daño a la víctima y que actuó en defensa propia, aunque ha aceptado la condena porque ha reconocido que le lesionó.
Los hechos ocurrieron sobre las 14:00 horas del 5 de diciembre de 2015, cuando el acusado quedó con la víctima en la calle Piñole de Oviedo para que le devolviera unas llaves. Según relata la Fiscalía en su escrito de calificación, una vez que se las dio, el procesado le pidió una serie de objetos y herramientas que le pertenecían, a lo que la víctima se negó por problemas anteriores, lo que derivó en una fuerte discusión. El acusado sacó entonces una navaja y se la clavó a la víctima en el tórax «con intención de causar la muerte», según el Ministerio Público.
La víctima pudo salir corriendo hasta su vehículo, que estaba estacionado en la calle Buenaventura Paredes, mientras era perseguida por el procesado. La víctima logró introducirse en el coche y ponerlo en marcha, aunque el acusado aún tuvo tiempo de rajar dos ruedas. A causa de la agresión, la víctima sufrió lesiones de las que tardó en curar 60 días, de los que seis estuvo hospitalizado.