Los vecinos de Las Caldas plantan cara a la contaminación

Claudia Granda OVIEDO

OVIEDO

Miembros de la asociación vecinal Por un Oviedo Saludable
Miembros de la asociación vecinal Por un Oviedo Saludable

La plataforma vecinal Por un Oviedo Saludable ha registrado una solicitud de modificación del Plan General de Ordenación Urbana para evitar la construcción de una planta de asfalto

19 feb 2019 . Actualizado a las 11:58 h.

La plataforma vecinal contra las plantas de asfalto y hormigón Por un Oviedo Saludable (PVOS) ha registrado en el ayuntamiento de la capital una solicitud de modificación puntual del Plan General de Ordenación Urbana. El motivo, evitar la construcción de una planta de asfalto y hormigón en la Cantera La Marina, situada en Santa Marina de Piedramuelle. La intención de esta asociación no es ni más ni menos que preservar la zona de la contaminación y el deterioro, tal y como explica su portavoz, Luis Alberto Suárez.

«En primer lugar queremos proteger el entorno así como la salud de las personas que habitan en él. No solo en Las Caldas, sino también en lugares como San Claudio o incluso La Florida y hasta el centro de Oviedo», explica Suárez. Preservar el estado del entorno del balneario es también de gran importancia, sobre todo para la economía de la zona. Tal y como explica el portavoz sus casi 100 trabajadores, así como los restaurantes del entorno, las cuevas prehistóricas allí enclavadas y los turistas que cada año acuden a las afueras de la capital se verían afectadas por la implantación de esta planta de asfalto.

Para la asociación no se trata de llevar a cabo una petición por capricho, sino de cumplir con la legislación. Para llegar a este punto se han reunido durante los dos últimos meses con los cinco grupos municipales, quienes han mostrado su apoyo a la iniciativa. Será durante el próximo pleno donde se abordará el tema y se votará para tratar de sacar adelante esta propuesta. 

Actualmente, la empresa Canteras Mecánicas Cárcaba, encargada de la explotación, posee un informe favorable de la Consejería de Industria. Según explica Suárez, la evaluación de impacto ambiental llevada a cabo para la obtención de la licencia fue de carácter simplificado, algo que no concuerda con las dimensiones del proyecto. «Debería haberse realizado una evaluación ordinaria, debido a que se trata de una actividad potencialmente contaminante. No sabemos por qué razón no se trató como tal», asegura el portavoz y añade que desde la consejería no les han dado una respuesta a esta pregunta.

Los vecinos tan solo piden la preservación de la zona. «Un proyecto así provocaría una gran contaminación no solo aquí, sino en toda la ciudad debido a los vientos del noroeste procedentes de Galicia. Es una realidad», zanja Suárez, que asegura que la principal intención de la asociación es «que se aplique el sentido común para causar el menor daño posible y el mayor beneficio para sus habitantes».