Somos plantea la instalación de cuatro «macroascensores» en Oviedo

OVIEDO

Ascensor público en Pamplona
Ascensor público en Pamplona UPN

Urbanismo quiere impulsar un modelo de «transporte público vertical» para solventar los problemas de accesibilidad en varios puntos de la ciudad

15 abr 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Urbanismo quiere apostar por un modelo de transporte público vertical en Oviedo. La idea puede sugerir un sistema revolucionario, pero ya está consolidada en otras ciudades tanto españolas como en el extranjero. El objetivo es facilitar la movilidad dentro de la capital con la unión de los ejes principales de comunicación mediante un mecanismo que permita superar las dificultades que plantea la orografía. Para conseguirlo, Somos tiene pensado instalar en la próxima legislatura, si forman parte del gobierno local, cuatro «macroascensores» que faciliten esa forma de moverse por la ciudad.

La intención de la formación morada es dotar a la ciudad de cuatro ascensores de gran tamaño que cumplan esa función. Lo harían en enclaves en los que la naturaleza impide un tránsito natural cómodo y la utilización de estos sistemas facilitaría la movilidad. Son ascensores de gran tamaño, para aproximadamente 25 personas, y que permiten introducir carritos de niños, sillas de ruedas o bicicletas. Ignacio Fernández del Páramo, concejal de Urbanismo, añade que deben reunir varias características más, que sean «rápidos, cómodos, seguros y que se contemplen medidas de urbanismo de género». Plantea, por ejemplo, que las paredes sean de cristal para que pueda verse desde el exterior, y en cada uno de los cuatro puntos en los que se instalen habrá dos cubículos para que uno suba mientras el otro baja.

La idea que defiende Del Páramo es instalar estos ascensores en grandes ejes de accesibilidad con un importante flujo de gente. Según explica el concejal, uno de ellos serviría para solucionar el problema que se plantea en el eje La Florida-Las Campas- El Cristo. La propuesta supone superar con uno de estos «macroascensores» el desnivel del Carlos Tartiere en el talud de la Ería. De esta forma no haría falta subir las numerosas escaleras que se colapsan por la cantidad de gente que las utiliza en días de partido del Real Oviedo. También facilitaría la comunicación desde el parque del Oeste para ir a la Ería al eliminar las pendientes más pronunciadas.

Otro de estos ascensores se ubicaría en la actual estación de Renfe. Ya existe uno de pequeñas dimensiones, pero está «infrautilizado», según el edil. Con el nuevo plan de movilidad Somos quiere que esa sea la gran estación de tren de Asturias y que desde ahí se articule el resto de comunicaciones de la ciudad. Por ello, propone estos ascensores para salvar el desnivel de la calle Uría con la plaza de los Ferroviarios y facilitar así el acceso a la Losa. Su idea es que se pueda ir desde el centro a la estación y, una vez allí, tener salidas cómodas para los barrios de La Florida y Vallobín y para Ciudad Naranco.

El tercero sería en el eje el Vasco-San Lázaro con la Fábrica de Gas para salvar la muralla. De esta forma se daría continuidad con una entrada a la altura de las Pelayas. Así se evitaría la pendiente de Azcárraga.

El último de estos ascensores, de iniciativa privada, sería en el Vasco. El plan es cubrir el gran eje que va desde Colloto hasta la rotonda de la Cruz Roja. Aquí un ascensor permitiría ascender a la línea en la que estaba el ferrocarril del Vasco. Esto facilita el trayecto, por ejemplo, a los que utilizan la bicicleta para desplazarse.

Este tipo de ascensores ya están en funcionamiento en ciudades españolas como Pamplona, en las que se usa para salvar el río, o Vitoria. También en el extranjero. El ejemplo más clásico es el de Lisboa, aunque en la ciudad portuguesa es un uso más turístico mientras que en Oviedo lo que se pretende es facilitar la movilidad entre puntos de gran afluencia en la ciudad y no tan orientada a los visitantes.