El recinto ferial recibió estuvo a rebosar incluso la madrugada del lunes al martes
03 sep 2019 . Actualizado a las 12:25 h.Las fiestas de El Cristo arrancaron el pasado lunes en Colloto con el cobro de una entrada para acceder al prau de la fiesta como principal novedad. Una circunstancia que generó polémica en los días previos pero que la gran afluencia a las verbenas se ha encargado de disipar. Por si quedaba alguna duda, ayer lunes, el recinto ferial volvió a recibir a cientos de personas a pesar de que hoy es laborable. Con la orquesta «Paris de Noia» sobre el escenario, de las más demandadas de España, se confirmó el éxito del modelo de las verbenas de taquilla en esta localidad ovetense.
Esta noche, además, culminan las celebraciones con la actuación de «Panorama», uno de los grupos estrella del verano asturiano, y de nuevo la expectativa es atraer a un buen número de personas para disfrutar en un recinto ferial en el que la anteción no solo ha estado en el escenario principal. A lo largo de los últimos cinco días se han realizado diversas actividades vecinales y otra serie de encuentros. Como la paellada vecinal o el reparto del tradicional bollo, del que ayer se entregaron más de 2.000 unidades.
Los encargados de abrir la taquilla y estrenar el paso por caja fueron «Los Secretos». Y el grupo, que lleva desde los años ochenta sumando éxitos, sumó el viernes la primera victoria para la Sociedad Collotense de Festejos (SOCOFE), que había justificado el cobro de entrada con la calidad de la programación. «Barajamos varias opciones de ingresos, ya que los gastos que suponen un evento de estas magnitudes no cubren los gastos, pero finalmente nos declinamos por poner un precio de entrada simbólico para el público», destacaron desde la comisión antes del inicio de unas fiestas por las que también han pasado orquestas de la talla de «Tekila» (con la compañía del televisivo Cristóbal Soria, habitual de programas deportivos) y «Assia».
Buen tiempo
Para garantizar el buen tiempo y asegurar la asistencia al recinto ferial, los miembros de SOCOFE decidieron además buscar ayuda divina. Y lo hicieron a lo grande. De esta forma entregaron un avestruz y miles de huevos, siguiendo la tradición con la que las parejas que se van a casar espantan la lluvia. La costumbre es llevar una docena pero parece que multiplicar la ofrenda ha servido a unas fiestas que han contado con buen tiempo. Y cuyo cierre, esta noche, no amenaza la meteorología.
