Bélgica despliega solvencia

M.G Reigosa

RUSIA 2018

YURI CORTEZ | AFP

Goleó a Túnez con una exhibición ofensiva de Hazard y Lukaku

23 jun 2018 . Actualizado a las 20:33 h.

El 3-0 ante la débil Panamá habla bien de Bélgica. El 5-2 que le endosó a Túnez, y pudieron ser bastantes más, empiezan a ser palabras mayores, porque el combinado africano venía de competir a un alto nivel en los amistosos previos al Mundial y en el debut frente a Inglaterra. Y será precisamente la tercera jornada, ante el combinado de Southgate, la que ofrezca ya una medida fiable de unos diablos rojos que vienen exhibiendo solvencia.

El conjunto que dirige Roberto Martínez asombra por su dominio de diferentes registros. Si puede lanzar el contragolpe, vuela, sobre todo cuando aparecen Mertens o Eden Hazard, y siempre con Lukaku moviéndose con instinto en el frente de ataque. Si tiene que combinar y masticar, va acumulando pases sin prisa. Si ve la posibilidad de romper líneas con un pase largo, no duda. Y, sin balón, es valiente en la presión.

Todo ese repertorio lo desplegó Bélgica frente a Túnez en un partido que se le puso de cara muy pronto. En el minuto cinco Hazard forzó un penalti que él mismo transformó. Diez más tarde, Mertens interceptó un pase horizontal y sirvió un balón al espacio para que Lukaku finalizase con mucho criterio.

Túnez acortó distancias de inmediato, en una falta lateral bien cabeceada por Bronn y mal defendida por la zaga belga. Dio un paso al frente. Como ante Inglaterra, trató de sacar siempre el balón jugado. Y esa virtud devino en penitencia, porque pagó muy caras las malas entregas y las intercepciones del rival. Aún así, durante unos minutos demostró que Bélgica también tiene su debilidades. Le faltó pólvora.

Al filo del descanso, en el tiempo añadido, llegó la puntilla. Meunier, magistral, cortó y filtró un balón entre los centrales viendo la llegada en carrera de Lukaku, que de nuevo resolvió con fiabilidad. Por si quedaban dudas, al poco de volver de los vestuarios llego el cuarto. Esta vez en un pase largo, preciso y perfecto, de Alderweireld a la espalda de la defensa. Hazard hizo un difícil control, dribló y marcó.

A partir de ahí, Bélgica administró sin renunciar a ampliar la cuenta. Y Túnez, que había perdido por lesión a Ben Youssef y Bronn en la primera parte, y que disponía de poco margen para cambiar, mostró arrojo y no dejó de intentarlo. Batshuayi, que entró por Hazard en el minuto 68, tuvo cinco claras ocasiones y anotó la más difícil. Y, al límite, Khazri encontró el premio a su buen hacer con un golpeo de calidad dentro del área, para sortear la estirada de Courtois.

- Ficha técnica:

5 - Bélgica: Courtois; Alderweireld, Boyata, Vertonghen; Meunier, De Bruyne, Witsel, Carrasco; Dries Mertens (Tielemans, m.86), Eden Hazard (Batshuayi, m.68); y Romelu Lukaku (Fellaini, m.59).

Seleccionador: Roberto Martínez (ESP)

2 - Túnez; Mustapha; Bronn (Naguez, m.25), Syam Ben Youssef (Ben Alouanem, m.41), Meriah, Maaloul; Badri, Sassi, Khaoui, Skhiri (Sliti, m.60); Fakhreddine Ben Youssef y Khazri.

Seleccionador: Nabil Maaloul.

Goles: 1-0: m.6: Hazard, de penalti. 2-0: m.16: Lukaku, 2-1: m.18: Bronn. 3-1: m.48+: Lukaku, 4-1: m.51: Hazard, 5-1, m.90: Batshuayi. 5-2: m.93+: Khazri.

Árbitro: Jair Marrufo (Estados Unidos). Amonestó al tunecino Sassi.

Incidencias: Partido de la segunda jornada del grupo G disputado en el Spartak Stadium ante 44.190 espectadores.