El vallisoletano comparece después del entrenamiento a puerta cerrada
16 dic 2017 . Actualizado a las 12:18 h.Rubén Baraja no es amigo de grandes titulares. Tampoco de excesos en sus comparecencia. Primera diferencia, frontal, con Paco. Cambio de discurso. El vallisoletano, consciente de la importancia de cuidar el lenguaje, evitó dar pistas de cara a su debut el domingo. Baraja fiel a sus principios, insiste en la obligación de trabajar para competir. «Llevamos poco tiempo pero me ha sorprendido mucho el recibimiento. Estamos muy contentos de poder ver la oportunidad. Los he encontrado con predisposición a trabajar. Me ha sorprendido bastante el compromiso, las ganas de querer hacer las cosas. Cuando estás en un equipo de esta magnitud hay cosas innegociables: actitud y ganas de querer mejorar».
Además, Baraja, cuestionado por la presencia de los chicos del filial, reconoce que la cantera es importante en la filosofía del club. «Si hay algo que tiene importancia en este club, son los de casa». El entrenador rojiblanco no pierde el tiempo en lamentos, tampoco en excusas. «Es evidente que tenemos jugadores importantes fuera del equipo. No es una excusa: ya sabíamos como estaba antes. Tenemos que buscar que el equipo compita, tenemos que estar motivados de cara al partido. Jugar en El Molinón para nosotros es un fortín».
Sobre la voluntad de sus jugadores
«Hay dos cosas vitales: la intención de querer cambiar y otra que den un paso adelante. Hay gente con peso, jerarquía y experiencia en el club. Tienen que llevar al grupo donde me gusta que esté».
Nacho Méndez
Rubén Baraja ensalzó al canterano, al que ve preparador para entrar en el equipo. «Nacho viene apretando, en dinámica de primer equipo, viene con posibilidades de estar en el once. Nuestra idea siempre pasa por dar confianza. Nacho tiene posibilidades de jugar»