Tres ultras del Sporting reconocen haber agredido a dos policías

Europa Press REDACCIÓN

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Juicio a los ultras del Sporting
Juicio a los ultras del Sporting

Los acusados aceptan condenas que van de un año a seis meses de prisión e indemnizaciones de hasta 6.000 euros. El ataque tuvo lugar en marzo de 2017 antes del partido con el Deportivo

05 abr 2018 . Actualizado a las 14:42 h.

Los tres ultras del Sporting de Gijón acusados de agredir a dos policías han reconocido este jueves los hechos tras llegar a un acuerdo con la Fiscalía y la acusación particular, en el juicio celebrado en el Penal 1 de Gijón. En concreto, Olaya S.G. ha aceptado una condena de un año de prisión por un delito de atentado y de seis meses de cárcel por uno de lesiones, así como el pago de una indemnización de 6.000 euros a uno de los agentes agredidos. En el caso de Aitor F.G., la pena acordada es de seis meses por un delito de desobediencia, mientras que Ignacio D.R. ha aceptado un año de prisión por un delito de atentado y el pago de una multa de 300 euros por uno de lesiones leves.

De acuerdo al relato fiscal, sobre las 11.00 horas del 5 de marzo de 2017 los agentes de la Policía Nacional nº 81.400 y 86.990 se encontraban en servicio de paisano en las inmediaciones del estadio de El Molinón, con ocasión del partido entre el Sporting de Gijón y el Deportivo de la Coruña. Los policías observaron que en el establecimiento Espicha Park, sito en la avenida de El Molinón, el acusado Aitor F.G., perteneciente al grupo radical de seguidores del Sporting Ultra Boys, originaba un altercado con seguidores del Deportivo de La Coruña, huyendo del establecimiento con otros nueve seguidores por el parque Isabel la Católica.

Por este motivo, los agentes procedieron a identificarse verbalmente y portando los carnes profesionales de manera visible, logrando identificar a cuatro de los seguidores en la salida del parque. En ese momento, apareció el primer acusado, a lo que la agente 86.990 volvió a identificarse como policía, negándose el procesado a entregar su documentación y tratando de zafarse para continuar la huida, siendo retenido por la policía. En esos instantes llegó la acusada, quien ante la petición de identificación por parte de la misma agente le dio dos puñetazos en la cara y agarrándole del pelo. Asimismo, lanzó a la agente al suelo, momento que aprovechó el primer acusado para huir del lugar. El agente que la acompañaba, ante esta agresión, intervino para auxiliar a su compañera, recibiendo del tercer procesado un puñetazo en la parte posterior de la cabeza y esquivando otros dos puñetazos.

A consecuencia de este hecho, la agente fue atendida en el Hospital de Begoña y sufrió hematoma eminencia tenar en mano derecha, dolor a la palpación de la musculatura paravertebral cervico-dorsal izquierda, precisando de tratamiento médico y rehabilitador por un periodo de 91 días, de los cuales 88 fueron impeditivos. Asimismo, le quedó como secuela dolor cervical con discreta irradiación izquierda, tendente a desaparecer en el tiempo. En cuanto a su compañero, el agente fue atendida en el Hospital de Begoña y sufrió contusión temporal derecha precisando de una única asistencia y restableciéndose en su sanidad en un plazo de dos días no impeditivos, por los que formula reclamación. Asimismo, el teléfono móvil de la agente 86.990 fue dañado a consecuencia de estos hechos, tasados los desperfectos en 100 euros, por los que formula reclamación.