El presidente del Sporting, durante el acto de reconocimiento a los socios de honor del club, rompe el silencio institucional sobre Mareo y el proyecto del club
08 mar 2019 . Actualizado a las 13:34 h.Se terminó el silencio presidencial en el Sporting. En mitad de una de las crisis más importantes de los últimos años, con el primer equipo -el importante- en tierra de nadie y el filial ausente de talento -el miniderbi confirmó la precariedad de potencial en el último eslabón de Mareo- el máximo mandatario del club, el presidente Javier Fernández, cómodo alejado de los focos, decidió romper su habitual mutismo. Tras años de continencia, el máximo accionista ejerció de portavoz y, también, de presidente.
Aprovechando el acto de reconocimiento a los socios de honor del club, Javier Fernández tomó la palabra para poner punto y final al silencio institucional sobre su proyecto en la entidad. La condena del verde, el único objeto de preocupación (lógico) en los aficionados, ha disparado el nivel de crítica social, señalando la alta participación en el mercado y cuestionando la ausencia de un proyecto estable basado en el melancólico Mareo.
Hasta ayer en el club rojiblanco, exceptuando las marcadas apariciones de Miguel Torrecilla, no se había apostado por ejercer un modelo de transparencia deportiva. Alimentados por la nostalgia y el desarraigo, el sector más crítico de la afición, molesto ante los malos resultados, exige, ahora más que nunca, una apuesta convencida por la cantera, contrariados ante el exiguo rendimiento del mercado internacional.
Javier Fernández, convertido a portavoz, escenificó -con un discurso matemático- el pensamiento del club y defendió con convicción el trabajo que se desarrolla en la Escuela de Fútbol, aunque reconoció las nuevas dificultades que afectan al emblema del Sporting. «El ejemplo de Mareo como cantera ya no es único. En los últimos años han surgido multitud de clones, con importación de jugadores y pesca sin escrúpulos en las canteras más reconocidas. Solo pido paciencia y comprensión. Quienes tantos avatares han vivido en la historia de este club saben que estos han sido siempre los mejores aliados», explicó el presidente.
Fernández, en un día muy señalado, ha comparecido frente al tabú de Mareo. Un discurso que no detiene la tristeza ni la crisis del proyecto, aunque, al menos, acorta las distancias entre la afición y el modelo de actuación del club. La firma del libro blanco.
