Un contraste que sorprende a los aficionados al fútbol
19 oct 2020 . Actualizado a las 14:28 h.El debut del Deportivo en Segunda división B se llevó algunas miradas curiosas de la afición sportinguista ante la nueva realidad de uno de sus habituales rivales directos en las pasadas temporadas. Para sorpresa de varios, se encontraron con un Riazor que acumulaba unas 3.000 personas en sus gradas, mientras el Sporting lo hacía sin espectadores en El Molinón - Enrique Castro 'Quini', dos horas después.
La diferencia se encuentra en el citado cambio de categoría, el conjunto asturiano juega una competición profesional de LaLiga, mientras el gallego disputa una no profesional con la RFEF. Desde el Gobierno nacional se interpreta que las categorías no profesionales requieren de público para garantizar su viabilidad económica, algo que no ocurriría en Primera y Segunda división, donde sí existen unos ingresos garantizados por televisión. Por consiguiente, ver aficionados en Riazor no supone una puerta abierta a que los sportinguistas puedan acudir en las próximas semanas a su asiento.
De hecho, desde el Ministerio de Sanidad se mantienen bastante firmes al respecto y se antoja complicado que las competiciones europeas tengan público en España, por lo que los conjuntos españoles partirán con desventaja en ese sentido frente a otros países, una vez que la UEFA ha dado luz verde al regreso a los estadios.
Hasta el momento, el Sporting ya ha perdido la taquilla de abonos frente al Logroñés, Girona y Tenerife. Una merma económica que irá en aumento, aunque no se baraja una bajada de sueldos según aseguró Javi Rico en su rueda de prensa.
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