Miguel Bosé y su expareja Nacho Palau se ven por fin las caras en el juzgado

Martín Bastos

VIRAL

Nacho Palau, a la salida del juzgado.
Nacho Palau, a la salida del juzgado. Zipi

20 oct 2020 . Actualizado a las 09:17 h.

Después de un retraso de casi ocho meses por la pandemia del coronavirus, Miguel Bosé y Nacho Palau se vieron por fin las caras en el juzgado que decidirá qué pasa con la doble filiación de sus cuatro hijos en común, Diego, Tadeo, Ivo y Telmo. El juicio no solo será mediático por la curiosidad que despierta siempre, y más últimamente, todo lo que rodea al cantante negacionista. También lo será porque podría sentar jurisprudencia ante una situación no definida hasta ahora por la legislación existente. Y es que el músico y el escultor compartieron la crianza de dos pares de mellizos que tienen ahora 9 años y nacieron fruto de la gestación subrogada. Dos de ellos llevan los genes y apellidos de un padre y los otros dos, los del otro. Los cuatro vivieron como hermanos bajo el mismo techo hasta la separación de la pareja hace dos años. Los hijos biológicos de Bosé residen con él en México, mientras que los del escultor permanecen en Valencia. A la salida del juzgado Palau aseguró que su propósito es conseguir que los niños «estén juntos los hermanos y si es más cerquita mejor; que los cuatro estén juntos y que se establezcan visitas». Miguel Bosé, por su parte, estuvo huidizo con la prensa. Entró y salió del tribunal oculto en la parte trasera de un vehículo. Pese a ello podemos despejar la duda que nos inquieta a todos: sí, Bosé llevaba mascarilla.

Mansión en Miami

Phil Collins acusa a su exesposa de invadir su casa. Quien también tiene un problema legal con su expareja es Phil Collins, que demandó a su exesposa y al actual marido de esta por haber invadido a la fuerza su casa en Miami Beach, de 1.100 metros cuadrados y valorada en 40 millones de dólares, y haber contratado guardias armados para mantenerlo a él fuera de la propiedad. Collins asegura que su exmujer Orianne Cevey Collins Mejjati Bates y Thomas Bates se «han negado a salir» de la vivienda. Los abogados del cantante se refieren a los Bates como «invasores» y dicen que Collins teme que estos «saquen, escondan o destruyan» objetos de su propiedad.