La mujer de Antonio David Flores se llevó el cheque de 200.000 euros
27 jul 2021 . Actualizado a las 09:13 h.La final de Supervivientes del pasado viernes lo tuvo todo. Un presentador ausente, una ganadora polémica, acusaciones de tongo, y todo bañado con una guerra de fondo entre dos bandos casi irreconciliables y veinte años de sufrimiento y dolor. Olga Moreno se coronó como la ganadora de una edición del reality en la que entró poco después de que su marido, Antonio David Flores, fuese despedido fulminantemente de Telecinco. Ocurrió tras la emisión de los primeros dos capítulos de la docuserie Rocío, contar la verdad para seguir viva, que supuso la vuelta a la televisión de Rocío Carrasco.
Su testimonio estremeció al país, y puso de patitas en la calle a su supuesto verdugo, que hasta el día antes había estado en nómina de la misma productora que ahora apoyaba de manera incondicional a su exmujer.
El maestro de ceremonias de Supervivientes, Jorge Javier Vázquez, mostró su apoyo públicamente a la hija de Rocío Jurado, pero no fue el encargado de alzar la mano de la ganadora, Olga Moreno. Casualmente, el día en el que Mediaset optó por emitir la final del programa, él tenía comprometida ya esa fecha con su gira teatral. El último programa de Supervivientes también estuvo rodeado de cierta controversia. Telecinco jugó al gato y al ratón con la programación y cambió el día de emisión, que sería el jueves, para enfrentar el programa a la final de La Voz Kids, incluso cuando ya tiene la audiencia del mes ganada y volverá a ser líder tras casi tres años consecutivos. Por eso fue Carlos Sobera el que presentó la última gala, a pesar de estar de vacaciones.
El agradecimiento de Olga
Al viernes, se llegó con una parte del público absolutamente dividido y bramando contra un «tongazo». ¿Los motivos? Las palabras que Olga Moreno hizo durante su alegato para no ser expulsada, que se emitiron días antes del final. «Dar las gracias a todo el equipo y gracias a los altos cargos que ya saben por qué», aseguró. De ahí surgieron todo tipo de interpretaciones, desde que agradecía la oportunidad de haber podido entrar hasta el amaño del concurso.
Sea como sea, ella se llevó a Málaga el cheque de 200.000 euros. Su llegada a plató tampoco estuvo exenta de críticas, al participar en el recibimiento el hijo menor de Rocío Carrasco, David Flores, afectado de una discapacidad. «Eres la mejor persona que he conocido en mi vida», le dedicó a Olga. El chico, que ha denunciado recientemente a su madre por no pasarle la pensión que le correspondería, no apareció en plató en ninguna ocasión cuando su hermana y su padre participaron en sendos realities de Telecinco, pero sí lo hizo para recibir a la mujer de su progenitor.
El especial sobre Olga
Tras la victoria de Olga Moreno, las redes se llenaron de comentarios en los que acusaban a la cadena de ejercer la violencia vicaria hacia la que por momentos es su protegida, Rocío Carrasco. La entrada en plató de David Flores colmó la paciencia de todos los que apoyan a la hija de Rocío Jurado. Pero aún había más. En un paso más de la guerra entre productoras que ya protagonizan La Fábrica de la tele (que produce el documental sobre Rociito) y Unicorn TV, de Ana Rosa Quintana, que primero fichó Rocío Flores y ahora se rumorea que ella misma protagonizará su propia serie dando su testimonio, se une ahora Bulldog TV, que produce Supervivientes y este miércoles dará voz a Olga Moreno para responder a todo lo que Rocío Carrasco ha dicho de ella en su docuserie. Se llamará Ahora, Olga, y se emitirá todo bajo el mismo paraguas: Mediaset.
La misma cadena que mientras Antonio David Flores se querella por despido improcedente, paga a su hija por contar su versión (y la de su padre) en El programa de Ana Rosa, y defiende a Olga en Supervivientes. Y ahora su mujer se embolsa el sueldo del reality hasta el final y se lleva el suculento cheque de 200.000 euros. Algunos usuarios ya han mostrado su tremendo descontento con las decisiones de la cadena, recordando incluso otros momentos en los que la respuesta del público ante lo que consideraban una injusticia provocó un boicot a los anunciantes, que terminó con la retirada de La Noria de la parrilla televisiva, y hace casi dos años de su reality estrella, Gran Hermano, cuya vuelta se espera en unos meses.