Según la transcripción de su interrogatorio -conocida hoy- Cristina de Borbón fue un verdadero frontón durante seis horas y media. Una roca ante las preguntas del juez, fiscal y abogada del Estado. Respondió «no sé» o «no lo sé» a 569 preguntas
El decano ha atribuído lo sucedido a un fallo del sistema por cuanto una persona accedió al edificio judicial con un dispositivo que permitiera la grabación
Doña Cristina se ha desvinculado de la gestión de Aizoon y ha reconocido que sabía que el rey había pedido a Urdangarin en 2006 que dejara los negocios relacionados con Nóos. La infanta ha respondido a las preguntas del juez Castro, del fiscal Anticorrupción y a las de la abogacía del Estado, pero no a las acusaciones