Cuatro presidentes de Galicia llegaron al poder después de unas elecciones, y los otros dos, Laxe y Rueda, a través de una moción de censura y de un relevo en el Gobierno, respectivamente
«Non estamos dispostos a que cando nos queren fusilar nos fagan sachar a cova primeiro: non participamos na votación», dijo el líder nacionalista en protesta por la aprobación de un nuevo reglamento del Parlamento que no fue consensuado por la oposición
Hitos el parlamentarismo gallego. Después de renunciar a sus aspiraciones en la política estatal, el político conservador moldeó el patrón del galleguismo frente al nacionalismo: «Nós non presentamos unha utópica autodeterminación, senon unha irreversible autoidentificación»
Como vicepresidente de la Xunta, fue el encargado de defender a Albor de la moción que convertiría a Fernando González Laxe en presidente. Treinta años después se la presentaron a él y recurrió a argumentos muy similares
A dramaturga Esther F. Carrodeguas recoñece que «foi complexo atopar o punto de equilibrio do humor, do estilo, así como o lugar dende o que se situar»
La eliminación de trámites elevará de nuevo la participación de los gallegos en el extranjero, que pueden ser claves en el resultado final; hay casi medio millón de electores