Amenábar hoy disfruta asustándonos, pero no fue siempre así. El pequeño Alejandro, el mismo que sufría en la oscuridad, se hizo mayor y alcanzó el éxito en ella. Nos atiende desde su casa recién llegado de San Sebastián, un festival que abrió a golpe de ritual satánico. «Regresión» es su última criatura.
Noelia Silvosa