Multimillonario, aventurero y visionario como pocos, así era Ricardo Soriano, segundo marqués de Ivanrey, quien tras la Guerra Civil decidió construir un pequeño vehículo de dos ruedas, la Soriano. Esta pequeña moto alargada y no muy estética fue, sin embargo, la primera que se produjo en serie en España y de la que se llegaron a construir unas 6.000 unidades. Una de ellas forma parte de la Fundación Jorge Jove y tendrá su sitio en el futuro museo de la automoción de Galicia.
Óscar Ayerra