Satisfacción en el PP por la aplastante victoria en Galicia y gran decepción en el PSOE
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C's admite su fracaso, mientras que Iglesias destaca que «nuestro país ya no se entiende sin UP»
26 sep 2016 . Actualizado a las 07:25 h.Satisfacción en el PP por la aplastante victoria de Alberto Núñez Feijoo. La cúpula popular considera que la mayoría absoluta no solo es un éxito personal indiscutible del presidente de la Xunta, sino que también refuerza al presidente en funciones en su intento de formar Gobierno, sobre todo tras la debacle de los socialistas. Rajoy se volcó en la campaña gallega, mientras sus apariciones en el País Vasco, donde las encuestas eran desfavorables, fueron mucho menores. Pero incluso Alfonso Alonso aguantó mejor de lo esperado.
Sánchez, muy tocado
En la sede popular de la calle Génova se consideraba anoche que el varapalo electoral de los socialistas debilita de forma muy importante el liderazgo de Sánchez, que queda muy tocado, lo que abriría la posibilidad de un cambio de posición forzado por los dirigentes territoriales que facilitara la presidencia a Rajoy. Aunque en el PP son conscientes de que no será fácil.
«Quiero resaltar que el PP ha ganado en Galicia con dos puntos más que hace cuatro años y más votos que en las anteriores elecciones, creo que este resultado, después de ocho años gobernando en unas circunstancias muy difíciles, dan prueba de la confianza que el PP y su candidato tienen entre los gallegos», afirmó la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, que destacó que casi triplica en escaños al segundo partido. «Los gallegos han apostado por un gobierno seguro, consolidado, que dé esperanzas y futuro a Galicia», añadió. Cospedal señaló que las urnas han castigado el bloqueo institucional y que el PSOE ha cosechado los peores resultados de su historia, al igual que en las generales, lo que dijo merece una «reflexión» por parte de Sánchez.
Gran decepción en el PSOE por el desastre sin paliativos en el País Vasco y el sorpasso en Galicia en número de votos, aunque no en escaños, tras una campaña en la que Pedro Sánchez se implicó al máximo en ambos territorios y en la que estalló la guerra abierta con los barones. «No estamos satisfechos, los resultados no son positivos para el PSOE», aseguró el secretario de organización, César Luena, que destacó, sin embargo, que el PSE será decisivo para formar Gobierno en el País Vasco y que el PSdeG ha empatado en el segundo puesto con En Marea. Concluyó su breve intervención considerando «un resultado negativo en ambas comunidades autónomas en una campaña en unas condiciones muy difíciles para el PSOE». Una alusión a los problemas internos del partido. A partir de hoy, los críticos se dispondrán a pasar factura al secretario general por el batacazo con el comité federal del próximo sábado como campo de batalla. Podemos se debió conformar con peores resultados de los que esperaba y señalaban las encuestas, pero destacados para una nueva fuerza política. Su irrupción en el Parlamento vasco, tras sus dos victorias en votos en las generales, quedó muy por debajo de las expectativas, aunque las autonómicas son muy diferentes.
Sí hubo sorpasso en Galicia, pero solo en sufragios, con menos diputados de los que se pronosticaban. «Somos la primera fuerza de ámbito estatal en Euskadi y la primera fuerza de la oposición en Galicia. Nuestro país ya no se entiende sin Unidos Podemos», escribió el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, en Twitter.
Ciudadanos, sin representación
Por su parte, consternación en Ciudadanos al no lograr entrar en ninguno de los dos Parlamentos. Ni siquiera consiguió reeditar el diputado que obtuvo UPyD en el 2012. La política de pactos de Albert Rivera no se vio refrendada en las urnas gallegas y vascas. «No hemos alcanzado el objetivo que nos habíamos planteado», admitió su vice secretario general, José Manuel Villegas, que explicó que Ciudadanos es un partido nuevo que ha pasado de tener representación solamente en el Parlamento catalán a estar presente en 12 Cámaras autonómicas y en el Congreso. Villegas señaló que los resultados en Galicia y el País Vasco en sí mismos no van a propiciar el desbloqueo político.
Mariano Rajoy telefoneó anoche a los vencedores de las elecciones gallegas y vascas, Alberto Núñez Feijoo e Iñigo Urkullu, para felicitarlos y también habló con el candidato de su partido en el País Vasco, Alfonso Alonso. Rajoy siguió la noche electoral en la sede nacional del PP acompañado de la cúpula del partido y de la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría. El Comité Ejecutivo Nacional se reunirá hoy para hacer un análisis de los resultados electorales y su posible incidencia en el desbloqueo político que mantiene al Gobierno en funciones durante nueve meses. Los pésimos resultados del PSOE debilitan el liderazgo de Pedro Sánchez, lo que podría hacer que los barones críticos hicieran variar la posición del partido hacia la abstención a Rajoy.