Darwin, expulsado de la clase

Patricia alonso / f. s. ESTAMBUL, REDACCIÓN

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OZAN KOSE | AFP

Turquía aparca la teoría de la evolución, Rusia oculta la represión de Stalin y Hungría impulsa el entrenamiento militar

23 oct 2017 . Actualizado a las 07:45 h.

Hay trasiego en las aulas. Los personajes históricos van y vienen. Sale Charles Darwin. Josef Stalin se esconde. Y algunos quieren que el uniforme sea militar. En países como Turquía, Rusia, Polonia e Hungría los integrantes de las comunidades educativas muestran su preocupación porque los gobiernos impulsan virajes en los currículos y temarios que van desde el veto a la teoría de la evolución hasta la imposición de una especie de instrucción militar. La polémica sobre el adoctrinamiento en las aulas no es exclusiva de Cataluña.

A mediados de julio, el Ejecutivo turco anunció que los programas docentes cambiarían para dejar paso a una orientación más islamista. «La yihad es parte de nuestra religión y hay que enseñar cómo interpretarlo correctamente», dijo el ministro de Educación, Ismet Yilmaz, en rueda de prensa. Sin embargo, varios sectores de la sociedad, y especialmente del sector educativo, dieron la voz de alarma ante lo que consideraban la adoctrinamiento religioso de los más pequeños.

A pesar de las voces en contra, el curso empezó con el nuevo programa educativo y con miles de profesores menos en las aulas, que perdieron su trabajo tras la purga realizada por Ankara. Algo que sin duda ha facilitado la implementación de una agenda islamista conservadora ideada por el partido AKP, el partido en el poder.

Una de las medidas más criticadas fue la eliminación de la teoría de la evolución del currículo escolar. Según el Gobierno, la teoría es demasiado compleja para niños de esas edades. Además, en los centros religiosos, que ganan terreno a los laicos desde la llegada de Erdogan al poder, los niños estudian el concepto de la yihad. Las autoridades turcas aseguran que el objetivo es enseñar el verdadero significado de la yihad, que significa «contribuir a la sociedad», y alejarlo del significado de «guerra santa». Sin embargo, el sindicato de profesores Egitim Sen, ve contradictorio que la teoría de la evolución sea un concepto complejo para los niños, y no así la yihad. «Son preferencias políticas», aseguró el presidente del sindicato, Feray Aytekin Aydogan, en declaraciones a AFP. 

«Una generación patriota»

También se ha visto reducido el tiempo dedicado a los ideales seculares del fundador de la república, Mustafá Kemal Atatürk. El presidente, Recep Tayyip Erdogan, declaró al inicio del curso que el Gobierno busca construir una «nueva Turquía» y «criar una generación que esté en paz con sus valores nacionales y espirituales, patriota, cualificada y libre». Para el principal partido de la oposición, el republicano CHP, el nuevo currículo «supone educar a una generación en los ideales ideológicos del partido islamista AKP».

La educación es un campo de batalla en la cada vez más polarizada Turquía. Muchos ciudadanos, especialmente los laicos, son muy críticos. Los más pudientes recurren a colegios internacionales, donde pueden pagarse unos diez mil euros anuales por curso.

Desde el intento de golpe de estado del 2016, más de 33.000 profesores han perdido su trabajo, acusados de vínculos con grupos terroristas, y más de 2.000 universidades y colegios han echado el cierre. A la lista de purgados de las escuelas públicas, se suman profesores han renunciado por miedo. Betül Öztürk, maestra en Ankara, declaró a AFP que algunas vacantes ya están siendo cubiertas por gente que carece de la formación necesaria. Ante la falta de docentes, el Gobierno anuncia 20.000 nuevas plazas para el curso 2018-2019.

El profesor Semih, purgado por el Gobierno de Turquía.
El profesor Semih, purgado por el Gobierno de Turquía. EROL UCEM | AFP

En Hungría el problema no es el número de profesores, reside también en las materias. El primer ministro, el ultraconservador Viktor Orban, plantea que se introduzca una asignatura relacionada con la defensa y el patriotismo, una especie de instrucción militar adaptada a las aulas de los pequeños. Tanto las autoridades húngaras como las Rumanas estudian que se implemente una única edición nacional de los libros de texto. Esto supondría «presentar una determinada visión del mundo como una verdad absoluta», advierte Christiane Brandauer, experto del George Eckert Institute, en declaraciones a Deutsche Welle

Inmigrantes buenos y malos

Los libros de texto polacos reflejan que inmigrantes como los ucranianos pueden ocupar los puestos de trabajo que no cubre la población autóctona, pero añade que otros llegados de otras culturas y religiones pueden generar conflictos. En estas aulas gana peso en los últimos tiempos los héroes locales en detrimento de otros personajes históricos.

En Rusia el Gobierno también intenta que el patriotismo llegue al pupitre. Pero hay partes de la historia que se obvian o se suavizan. El libro de Andrei Suslov que retrata lo peor de Stalin ha sido considerado «peligroso para la salud de los estudiantes».

España | Inspectores de educación tratarán «la necesidad de evitar intromisiones políticas»

Inspectores de Educación de toda España debatirán durante esta semana, en su XVIII Encuentro Nacional, sobre la «necesidad» de dotar a la inspección de educación de una «mayor independencia técnica y profesional» para que «realmente» cumplan con sus funciones y atribuciones, que «eviten intromisiones políticas e intereses arbitrarios». También abordarán la puesta en marcha de una ley que organice todos los servicios de inspección de las distintas administraciones educativas y que garantice un tratamiento común a los ciudadanos. Las jornadas se celebrarán en la Universidad de Alcalá de Henares el 25, 26 y 27 de octubre.

La inspección educativa centró parte el debate en el Congreso de durante la semana pasada. A la moción de Ciudadanos rechazada por el Pleno, para dotar de mayores atribuciones a la Alta Inspección Educativa, para combatir el adoctrinamiento en las aulas, le siguió un día más tarde la propuesta de ley de la formación naranja para crear una agencia de inspección independiente y una proposición no de ley del PP para reforzar la capacidad de este organismo.

En Alcalá de Henares se debatirá sobre el Pacto Social y Político por la Educación. Los expertos de la inspección indican que «no es un fin, sino un medio para alcanzar una mejora de la calidad del sistema en su conjunto, será el contenido de la reforma educativa el que determine la idoneidad del pacto». En su encuentro, los inspectores también pondrán el foco sobre los «agujeros negros» del sistema educativo que, a su juicio, son la formación inicial de los docentes, el sistema de acceso a la función pública, el fracaso escolar, la carrera docente, el abandono temprano, la educación infantil, la educación de personas adultas, la formación profesional y los idiomas.

El 15 % de los profesores alemanes rechazan la teoría de la evolución

En las escuelas alemanas la teoría de la evolución es obligatoria dentro de la asignatura de Biología. No obstante, cada vez más profesores rechazan el legado de Darwin, que se imparte demasiado tarde, a juzgar por muchos pedagogos. Según una encuesta realizada por la Universidad Técnica de Dortmund, el 15 % de los maestros de enseñanza media no aceptan la teoría de la evolución. El porcentaje cae hasta el 7 % en el caso de los novatos. Les ampara la Asociación de Escuelas de Confesión Evangélica (VEBS), que representan a 168 colegios del país en los que se imparte el creacionismo. Los expertos hablan de 1,3 millones de creacionistas en Alemania. Una encuesta realizada por la revista científica Zeit Wissen revela que uno de cada dos alemanes considera que un poder supremo creó la Tierra y el 29 % no piensa que el hombre descienda del primate.

En Francia, la extrema derecha quiere una «narrativa nacional»

En Francia, la extrema derecha quiere llevar a la escuela su dogma de la preferencia nacional. La líder del Frente Nacional, Marine Le Pen, insistió durante la campaña electoral de las presidenciales en que «la escuela debe hacer pequeños franceses», dedicando la mitad del tiempo lectivo al aprendizaje de la lengua y abordando el resto de materias en el marco de la «narrativa nacional».

Asimismo, la ultraderecha también quiere poner fin a ELCO, un programa público que ofrece a los hijos de inmigrantes clases extraescolares del idioma nativo de sus padres.