El Gobierno elude cualquier tipo de responsabilidad por el caos de la AP-6

Francisco Balado Fontenla
fran balado MADRID / LA VOZ

ACTUALIDAD

CESAR MANSO | Afp

Tras señalar primero a los conductores, ahora apunta a la concesionaria de la autopista

09 ene 2018 . Actualizado a las 07:51 h.

El Gobierno no tiene intención de asumir ningún tipo de responsabilidad por el caos vivido la madrugada del sábado al domingo en la AP-6, en el que miles de conductores, familias y niños tuvieron que pasar la noche en la carretera atrapados por la nieve. Tanto desde el Ministerio de Fomento como desde el de Interior echan balones fuera y eluden tener parte de culpa por la ratonera en la que se vieron aprisionados un gran número de ciudadanos a su regreso de las vacaciones de Navidad en la principal vía de comunicación entre la capital española y el noroeste peninsular. En un primer momento no dudaron en responsabilizar directamente a los propios conductores, acusándolos de no informarse adecuadamente del estado de la vía antes de ponerse en marcha, de no viajar preparados con cadenas o de hacer caso omiso a las advertencias lanzadas por la Dirección General de Tráfico (DGT). Con el paso de las horas, al comprobar que lo único que conseguían era caldear todavía más el ambiente, trataron de suavizar su mensaje contra los afectados y cargar más las tintas sobre Abertis, la concesionaria.

El ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, que en breve comparecerá en el Congreso para tratar de explicar lo sucedido, responsabilizó directamente a Abertis: «Tiene la obligación de disponer de los medios necesarios y de adoptar las decisiones relacionadas». El ministro defendió que es así como se recoge en el protocolo y recordó que existen sentencias del Supremo de «incidentes muy similares» que lo determinan de esta manera.

En el mismo sentido se expresó otro de los grandes señalados, el director general de Tráfico, Gregorio Serrano: «Abertis tendrá que explicar lo que ha sucedido y que convirtió la AP-6 en una ratonera», aunque él mismo se aventuró a decir que se dieron «un cúmulo de múltiples causas». Entre estas no excluyó «la decisión poco acertada de algunos conductores que, teniendo información de la nevada, se pusieron a viajar sin cadenas». Serrano defendió en la Ser la gestión de su departamento durante el fin de semana, un operativo que él mismo se encargó de coordinar desde Sevilla, su ciudad natal.

Zoido, en el palco del Pizjuán

Quien también pasó el fin de semana en la ciudad hispalense fue el ministro del Interior, Juan Antonio Zoido, reconocido forofo sevillista que el sábado sufrió desde el palco del Sánchez Pizjuán la goleada de su equipo a manos del eterno rival mientras miles de conductores se preparaban para pasar la noche dentro de sus coches. Serrano y Zoido también comparecerán en el Congreso a petición propia.

Mientras, la concesionaria Abertis, que el pasado 1 de enero aumentó su tarifa hasta los 12,5 euros a cada turismo que completa los poco más de 70 kilómetros que unen las localidades de Villalba y Adanero, trata de repartir culpas. Asegura que fue previsora y que el mismo viernes por la tarde activó la máxima alerta desplazando todos los medios a su alcance. Anna Bonet, directora general de autopistas de esta compañía, también habló de un «cúmulo de circunstancias» en el que incluyó la falta de experiencia de algunos conductores en condiciones climáticas adversas, el gran volumen de tráfico o la poca visibilidad.