Macron cree que EE.UU. romperá el acuerdo con Irán

Adriana Rey NUEVA YORK / CORRESPONSAL

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LUDOVIC MARIN

Trump anunciará el 12 de mayo si la Casa Blanca mantiene el pacto firmado con Irán en 2015

27 abr 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Después de tres días de besos, abrazos y palmadas en la espalda entre Donald Trump y Emmanuel Macron, el francés reconoció que el resultado de la cumbre franco-americana podría no haber sido el esperado. A pesar de las advertencias en su discurso en el Congreso de EE.UU., Macron admitió ayer que probablemente fracasó en su intento de persuadir a Trump para que permanezca en el pacto nuclear suscrito con Irán. «Creo que acabará con el acuerdo por razones domésticas», manifestó antes de partir a París. La misión no era fácil. Aún así, el jefe del Pentágono, James Mattis, trató de calmar las aguas asegurando que todavía «no hay una decisión» sobre el acuerdo con Teherán. Mattis desveló que fuerzas especiales francesas llegaron hace quince días a Siria para ayudar a EE.UU. en su lucha contra el Estado Islámico. Una estrategia de Macron para reivindicarse ante Trump como el mejor aliado y convencerle de paso que si se retira de Siria le estará cediendo en bandeja el país árabe a Irán.

El inquilino de la Casa Blanca deberá anunciar el próximo 12 de mayo si continúa o no en dicho acuerdo firmado con Irán en el 2015 y junto con Francia, Alemania, Reino Unido, Rusia y China

Batalla de egos

A pesar del bromance del que hablan los medios, las diferencias entre Trump y Macron siguen siendo profundas y la sensación tanto en EE.UU. como en Europa es que el francés regresa a casa con la manos vacías. Más allá de las imágenes y las demostraciones de afecto, la realidad es que ha habido pocos movimientos políticos por parte del republicano. «¡Es solo una batalla de egos! Son dos grandes narcisistas que se adoran a sí mismos. Es todo una estrategia de comunicación», advirtió Michael Onfray, uno de los filósofos más famosos en Francia. Antes de volver a París, Macron tuvo un encuentro con estudiantes de la universidad George Washington de la capital estadounidense. El evento despertó tal atención, que los pases se agotaron en 10 minutos. En mangas de camisa, el presidente francés contestó a preguntas de los alumnos sobre las relaciones entre Rusia y Europa o las huelgas en Francia.