Críticas a la gestión de Urkullu tras el derrumbe del vertedero de Zaldibar

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

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Varios operariores trabajan, este lunes, en el rescate de los cuerpos de los dos desaparecidos en el desprendimiento del vertedero de Zaldibar
Varios operariores trabajan, este lunes, en el rescate de los cuerpos de los dos desaparecidos en el desprendimiento del vertedero de Zaldibar Miguel Toña

La polémica empaña el arranque de la precampaña para la reelección del lendakari

18 feb 2020 . Actualizado a las 08:27 h.

El pasado 6 de febrero se produjo el derrumbe del vertedero de Zaldibar, una localidad vizcaína en las proximidades de Ermua y Eibar. Medio millón de toneladas de residuos no urbanos se desprendieron por la ladera y cayeron sobre la autopista AP-8, provocando en su caída la desaparición de dos trabajadores del recinto, cuyos cuerpos todavía no han podido ser localizados por los equipos de rescate.

La primera tarea de los servicios de emergencia fue la recuperación de los cadáveres de los dos operarios desaparecidos, pero a las pocas horas de poner en marcha el operativo de rescate, los trabajos tuvieron que ser suspendidos tras detectar la presencia de amianto entre los residuos. Este fue el primer tropiezo en la gestión del derrumbe del vertedero, que ha desatado fuertes críticas contra el lendakari Urkullu por parte de los partidos de la oposición.

Además de por la tardanza en la recuperación de los cuerpos de los dos trabajadores desaparecidos, los principales partidos de la oposición en el Parlamento vasco también han arremetido contra Iñigo Urkullu por la incapacidad para hacer frente a los incendios detectados en la escombrera a partir del 14 de febrero. La humareda provocada por el fuego contiene un alto nivel de dioxinas, por lo que el Gobierno vasco recomendó a la población de las localidades cercanas que mantuviese las ventanas de sus casas cerradas. Los vecinos de la zona han expresado su preocupación por esta situación, particularmente por los daños que pueda causar a los niños.

Patios cerrados en los colegios

Las clases no se han suspendido en el entorno del vertedero. Los centros educativos de Ermua, Eibar y Zaldibar adoptaron este lunes una serie de medidas drásticas para limitar al máximo la exposición de los alumnos a las dioxinas y furanos que llegan a estas localidades procedentes del incendio del vertedero. Desde este lunes y durante los próximos días, los estudiantes no saldrán a jugar al patio en los recreos ni realizarán ninguna actividad deportiva al aire libre. Tampoco abrirán las ventanas hasta nueva orden. Buscan cumplir así las recomendaciones del Gobierno vasco: no ventilar y evitar el ejercicio físico en el exterior. Estos consejos también obligaron a suspender el domingo el partido entre el Eibar y la Real Sociedad en Ipurua.

La oposición en el Parlamento vasco ha criticado con dureza la gestión del lendakari, Iñigo Urkullu. La secretaria general del PP vasco, Amaya Fernández, censuró «la arrogancia y la prepotencia» con la que el PNV gestiona la crisis de Zaldibar y señaló que esta actitud de los nacionalistas vascos es «inaceptable».

Amaya Fernández lanzó estas preguntas dirigidas a los responsables del PNV: «¿Por qué el lendakari tardó cuatro días en dar la cara en el caso Zaldibar?, ¿por qué falló el control y la inspección del vertedero de Zaldibar? y ¿por qué los vascos seguimos recibiendo información sesgada, incompleta y contradictoria sobre el problema medioambiental?».

En la misma línea se expresaron los dirigentes locales de Podemos. El responsable de Comunicación de Podemos Euskadi, Andeka Larrea, calificó este lunes de «desastrosa» la gestión del PNV.

El suceso ha empañado los primeros días de la precampaña de Iñigo Urkullu de cara a su reelección como lendakari en los comicios del 5 de abril. Aunque todos los sondeos son favorables al PNV, la gestión de este episodio podría dañar la popularidad de Urkullu, que a juicio de la oposición ha sido poco sensible tanto con los familias de los dos desaparecidos como con la población.

A todo esto se añde un nuevo problema, ya que los geólogos alertan de la inestabilidad del terreno y del riesgo de nuevos derrumbes.