María Jesús Suárez Valladares, dermatóloga: «Dormir con el maquillaje envejece tres días»

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Una de las claves para el cuidado de la cara es la protección solar que, erróneamente, se suele asociar al sol directo, pero también afecta con nubes. Otra, una buena limpieza facial, si no se hace, pueden aparecer espinillas, puntos negros y acné

15 mar 2021 . Actualizado a las 21:10 h.

En un momento en el que la cosmética natural está ganando seguidores frente a la artificial, María Jesús Suárez Valladares, dermatóloga del Hospital QuironSalud A Coruña, señala que la principal diferencia entre ambas es la rapidez con la que queramos obtener resultados. También explica que la piel puede acostumbrase con el paso del tiempo a los cosméticos, algo que se conoce como taquifilaxia, por lo que debemos cambiarlos cuando notemos una disminución en su eficacia. 

1 ¿La piel se acostumbra a los productos? ¿Hay que cambiarlos?

Sí. Este fenómeno se conoce como taquifilaxia y se refiere a la disminución del efecto de un medicamento al ser administrado de forma repetida. Un ejemplo clásico puede ser el uso de los corticoides tópicos. Por ello, debemos cambiar los productos cosméticos cuando notemos una disminución o ausencia de eficacia en relación al inicio del uso del mismo. Esto puede ocurrir por una adaptación fisiológica de la piel al producto, por una disminución de absorción o incluso por un aumento de degradación del producto.

2 ¿Son mejores los cosméticos naturales que los artificiales?

La cosmética natural, propiamente dicha, sería tratar nuestra piel con elementos de nuestro frigorífico, como yogur, frutas, vegetales o algunos aceites... A favor, hay que decir que existe antes que la artificial y que se ha demostrado efectiva a lo largo del tiempo. De hecho, el aceite de argán, por ejemplo, se usaba hace muchos siglos y recientemente se ha introducido en la industria cosmética. La diferencia está básicamente en la rapidez de respuesta y la eficacia de estos. La artificial se vale de productos químicos capaces de abordar el problema de forma más específica.

3 ¿Cuál debemos utilizar y para qué?

La elección de una u otra depende de los resultados que queramos obtener, de la rapidez con la que los queramos, y de nuestra forma de entender la vida, ya que cada vez hay más personas que rechazan lo artificial. No hay por qué centrarse en uno de los dos tipos, se pueden combinar. La natural puede venir muy bien para limpiar o hidratar tu piel, y a un coste muy bajo, mientras que la artificial puede servir para evitar la aparición de arrugas o eliminarlas, a un coste mayor, pero también con una efectividad más alta. En la consulta nosotros somos más defensores de la artificial ya que nuestros pacientes buscan soluciones rápidas y visibles.

4 ¿Qué pasa si dormimos con el maquillaje?

Que estropea la piel. Son productos exógenos hechos para cubrir un rostro o imperfecciones y no deben estar en la piel de forma indefinida. Además, está demostrado que por las noches se produce el recambio celular y recuerdo una charla de una dermatóloga que decía que si te duermes maquillada, los radicales libres que se «adhirieron» a tu maquillaje van a seguir actuando sobre tu piel. Los radicales libres provocan que haya una deficiencia de colágeno y que esto ocasione la aparición de líneas de expresión. El mito de que «una persona que duerme sin desmaquillarse envejece un equivalente a tres días» es ¡verdad! Además, el maquillaje va a taponar el poro provocando la aparición de puntos negros, espinillas y acné. Lavarse la cara antes de ir a dormir es básico, pero si hay productos que cubren nuestra piel es absolutamente necesario.

5¿Cuál es el cuidado más importante de la cara?

La limpieza facial para eliminar impurezas, polución y preparar la piel para otros pasos de la rutina. Pero no debemos olvidar el cuidado a largo plazo. Aquí la clave es la fotoprotección diaria, muchas veces digo que el fotoprotector solar es un concepto que provoca confusión ya que lo relacionamos con el sol, pero incluso en Galicia donde no sale todos los días, la radiación ultravioleta está presente y con ella todos los problemas que puede acarrear la exposición crónica y continua a los rayos UVA y UVB como el cáncer de piel, el daño celular y, por supuesto, el fotoenvejecimiento.

6 ¿Cuál es la mejor manera de limpiar la cara?

Debe lavarse diariamente al menos por la mañana y por la noche con agua y jabón. No existe un limpiador universal mejor que el resto, sino uno que se adapta mejor a las necesidades de la persona en cada momento. Estas van cambiando según la edad, el clima, lugar de residencia... y para elegir el más adecuado debemos tener en cuenta estos factores. Actualmente con las mascarillas debemos ser muy cuidadosos en la limpieza facial, porque entre otras cosas la oclusión nos provoca una alteración en el pH de la piel, modifica la flora cutánea habitual y puede favorecer irritaciones y aparición de acné o también conocido el «maskacné». Por ello, debemos escoger un limpiador que no reseque, que mantenga un pH ácido y respete la flora cutánea, que no irrite y que a su vez sea capaz de regular la secreción de sebo según cada persona.