Bolsonaro afirma que cumplirá la Constitución pero evita hablar de la derrota

Héctor estepa RÍO DE JANEIRO / E. LA VOZ

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Rechaza de forma tácita los bloqueos de carreteras, que se intensificaron este martes

17 nov 2022 . Actualizado a las 13:15 h.

La expectación era máxima este martes en Brasil cuando el equipo de Jair Bolsonaro anunció que el presidente iba a hablar al país, casi dos días después de haber perdido las elecciones ante el izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva. Bares y restaurantes sintonizaron la señal de los principales noticieros, que también se filtraban por las ventanas de los edificios del sur de Río de Janeiro.

Gritos a favor y en contra del líder ultraderechista comenzaron a surgir en las calles cuando Bolsonaro apareció en el vestíbulo del Palacio da Alvorada, en Brasilia. Se apagaron pronto, porque el presidente apenas habló durante poco más de dos minutos, sin admitir la derrota de forma directa, pero dejando claro tácitamente que no pondrá trabas al traspaso de poder. «Continuaré cumpliendo todos los mandamientos de nuestra Constitución», dijo Bolsonaro.

El líder ultraderechista había criticado durante años el sistema electrónico de votación vigente en Brasil desde mediados de los años 90, sembrando dudas sobre un posible fraude en su contra, pero este martes, durante su comparecencia, no hizo referencia a irregularidades en el recuento.

Sí habló sobre un sentimiento de injusticia electoral cuando se refirió a los manifestantes que, desde el domingo, bloquean algunas de las más importantes vías del país en protesta por la victoria de Lula en las urnas. «Los actuales movimientos populares son fruto de indignación y sentimiento de injusticia de cómo se dio el proceso electoral», apuntó, sin ampliar la reflexión, pidiendo tácitamente a sus seguidores que se marcharan a su casa.

Métodos «de la izquierda»

«Las manifestaciones pacíficas siempre serán bienvenidas, pero nuestros métodos no pueden ser los de la izquierda, que siempre perjudicaron a la población, como la invasión de propiedad, la destrucción de patrimonio y la afectación al derecho de ir y venir», señaló Bolsonaro.

Los bloqueos de carreteras se intensificaron durante este martes, llegando a afectar a 17 estados y provocando un inicio de desabastecimiento, especialmente en hospitales. En la mayoría de los casos quienes cierran las vías son apenas unas decenas de manifestantes y camioneros, que colocan sus vehículos en medio de la carretera.

Varios gobernadores enviaron a la Policía Militar a abrir el paso, pero en casos específicos, como en São Paulo, decidieron retirarse porque los manifestantes habían llevado a sus hijos menores de edad a los bloqueos y temían que saliesen heridos si utilizaban material antidisturbios.

Los agentes sí consiguieron desbloquear la principal avenida de Río de Janeiro, mientras los detractores de Bolsonaro pedían que se investigase el papel del cuerpo de policía de carreteras, después de que no pudiese evitar los bloqueos, suceso que se mezcla con los retenes organizados durante la jornada electoral que fueron muy criticados por la izquierda, que señala especialmente al líder de dicha sección policial. El Supremo ha iniciado las primeras investigaciones por posible pasividad policial a la hora de evitar los bloqueos, ordenando tanto a ese cuerpo como al Ejército acabar con los cortes de carreteras.

Reivindicación de su resultado

«La derecha surgió de verdad en nuestro país. Nuestra robusta representación en el Congreso muestra la fuerza de nuestros valores», señaló Bolsonaro. «Formamos diversos liderazgos por Brasil. Nuestros sueños siguen más vivos que nunca (...) Hasta enfrentando a todo el sistema, superamos una pandemia y las consecuencias de una guerra», añadió el presidente.

«Siempre fui tildado de antidemocrático, y, al contrario de quienes me acusaban, siempre jugué dentro de las cuatro líneas de la Constitución», subrayó Bolsonaro, que agradeció el apoyo a los 58 millones de brasileños que le votaron, sin poner en duda la cifra, aunque tuvo que ser Ciro Nogueira, el jefe de la Casa Civil, quien aclaró a los periodistas que había sido autorizado por el presidente para iniciar la transición de poder en los próximos días.